Cáritas cumple seis décadas de servicio a los más vulnerables

Seis décadas al servicio de los más vulnerables. '60 años uniendo corazones, transformando vidas'. Con este lema, Cáritas Diocesana de Salamanca ha celebrado su aniversario como institución eclesial que ha sabido adaptarse a los tiempos y las dificultades que atravesaba cada momento. La ONG católica surge en Salamanca como continuidad del Secretariado Diocesano de Caridad, creado por Acción Católica, en 1945, hasta la constitución como Cáritas Diocesana en Salamanca en el año 1963.

Del reparto de la ayuda social americana que se realizaba en los años de la posguerra, el paro y la pobreza en los años 70 y 80; la creación de centros para afrontar problemáticas como el consumo de drogas, el sinhogarismo, el aumento de la inmigración o la aparición del Sida, donde Salamanca fue pionera con el primer espacio residencial en la iglesia Nueva del Arrabal que se trasladaría en el siglo XXI a su actual emplazamiento tras la cesión del Obispado. De ahí a los problemas actuales como la soledad, la salud mental o la brecha digital agravados tras la pandemia. «El verdadero mal social no está tanto en el crecimiento de los problemas, si no en el declive de la atención sobre todo en algunos sectores de la población como inmigrantes, refugiados y salud mental», destaca la directora de Cáritas Salamanca, Carmen Calzada.

En la actualidad, Cáritas está formada por un equipo multidisciplinar repartido en cinco áreas de trabajo: Acogida y Animación comunitaria, Inclusión Social, Inserción Laboral, y Administración y Gestión. Cuentan con 23 programas y 11 centros (así como los 28 equipos que forman las Cáritas parroquiales de toda la Diócesis), apoyados por la red de voluntariado.

Durante el último año, han acompañado a más de 12.200 personas (incluyendo voluntarios). Mujeres y hombres vulnerables con perfiles muy diferentes: familias, niños y adolescentes, inmigrantes, mayores, personas sin hogar, personas con problemas de adicciones, VIH, personas privadas de libertad, con problemas de salud mental, o personas que necesitan formación para acceder a un puesto de trabajo digno.

Los últimos datos de la 'Operación Vivienda' reflejaban la importancia de Cáritas hoy en día: la organización eclesial ayudó a pagar el alquiler, suministros como la electricidad o la calefacción a 1.946 familias, la cifra más alta de los últimos cinco años. Más allá de las ayudas, la organización realiza un trabajo de forma íntegra para el desarrollo de las personas.

Con la mirada en el futuro, Cáritas afronta los retos tras su aniversario a través de 60 propuestas divididas en 8 grupos. Los objetivos son: garantizar el derecho de acceso a los bienes básicos a todas las personas; favorecer el acceso a una vivienda digna; apostar por el trabajo decente y el empleo de inserción; cuidar y atender la salud mental; combatir la brecha digital; potenciar la cultura del encuentro personal e intercultural; cuidar la creación y desarrollar una cultura para la paz; y hacer visible la realidad social, denunciando las injusticias.

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