Miércoles, 5 de julio 2023, 17:00
El calor y los cambios bruscos de temperatura empeoran la circulación sanguínea sobre todo durante los meses de verano. Las personas de edades más longevas están más expuestas a este tipo de cambios y a la aparición de otros factores como las varices.
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Existen multitud de factores por los que pueden aparecer problemas circulatorios como las varices, la esclerosis, las estrías o los coágulos sanguíneos de las extremidades.
Un truco para mejorar la circulación de la sangre es la hidratación, sobre todo en los meses de verano donde el calor se intensifica. Es favorable preferir el agua antes que bebidas azucaradas. Hacer actividad física cada día para favorecer el movimiento y el riego de la circulación, pero sin pasar un exceso de horas de pie o sentados, de continuado, puesto que favorece la retención de líquidos.
Utilizar ropa ligera, que no sea muy ceñida al cuerpo, puesto que es necesario que nuestro cuerpo traspire y no sude en exceso.
También es aconsejable buscar al menos media ahora al día para tener las piernas elevadas y en reposo. Los masajes y la estimulación de zonas como las piernas y los pies favorecen la salud de nuestro sistema circulatorio.
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