Qué es la ITV voluntaria y por qué te puede ayudar

Sí, la ITV voluntaria existe y puedes beneficiarte de ella. Aunque parezca mentira no lo es, puedes pasar la inspección por tu propia decisión aún cuando este trámite que muchos vehículos han de pasar cada año sea un auténtico dolor de cabeza para los conductores.

La ITV voluntaria puede ser muy útil, sobre todo en aquellos casos en los que se va a realizar un viaje largo con el coche o si se está pensando en comprar un coche usado o de segunda mano.

Esta consiste en la inspección normal que se hace como rutina pero en un momento diferente al que por norma le toca, puede contratarse de forma completa (como una más revisiones normales) o parcial, donde solo se comprobaría a petición siempre del interesado el funcionamiento de algún elemento concreto o de algún sistema específico. Vamos una revisión del coche pero con el sello de la ITV.

Eso sí, esta ITV voluntaria tiene un coste menor a la inspección obligatoria y no afectará a la fecha a la que esta está programada, es decir, aunque hagas la ITV voluntaria tendrás que acudir también a la obligatoria.

Por tanto, esta ITV puede ser de gran utilidad para estar seguros al cien por cien de que nuestro coche está en las mejores condiciones o aquel vehículo que vamos a adquirir no tiene ningún problema.

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