El polémico Luca de Masterchef tiene que ser atendido por los médicos en directo

Luca es uno de los aspirantes que participan en 'Masterchef 11'. Ha generado muchas críticas en redes sociales por sus comportamientos y por la supuesta sobreprotección del programa ante su bajo nivel de cocinado, únicamente por su actitud y por acercar a los más jóvenes al reality a través de este especialista en 'Tiktok'.

Las prisas nunca son buenas consejeras, especialmente en el contexto de 'MasterChef'. Los concursantes se enfrentaban a los desafíos culinarios del chef Xanti Elías en Huelva, divididos en dos equipos, y la necesidad de ser los primeros los embargaba. Durante el proceso de cocina, Luca, transportando una bandeja, tropezó con sus compañeros y cayó al suelo, provocando un susto generalizado y un grito de sorpresa.

Los médicos acudieron rápidamente y le aplicaron un vendaje en el pie mientras el concursante lamentaba la situación, expresando su negativa a ser llevado a un hospital: «Estoy aquí porque no quiero ir al hospital, mis padres saben lo mucho que le temo«.

A pesar de que Jordi Cruz le cuestionaba repetidamente sobre su estado de salud, Luca se mantenía firme en su decisión: «Si quedo cojo, iré al fisioterapeuta, pero no iré al hospital porque me da miedo. ¡Y mucho menos con mis compañeros cocinando y yo con una vía intravenosa... no, no!». De hecho, Luca se reincorporó a la cocina: «Estoy cojo y, además, coordinando la cocina». Afortunadamente, todo quedó en un simple susto, un golpe contra el cubo de basura que no estaba previsto.

Conforme avanzaba el tiempo de cocina, Luca, el tik toker del programa, se sentía cada vez mejor, incluso bromeando con sus compañeros: «¡Llévenme a la cama ahora que he trabajado mucho!».

Durante varias ocasiones, tanto sus compañeros de equipo como los jueces le pedían a Luca que se tranquilizara mientras cocinaba, ya que se mostraba muy acelerado. Siendo uno de los señalados como favoritos para ser expulsado esa noche, Luca admitía que le gustaba «molestar a los demás». Finalmente, tras su caída, tuvo que tomarse una pausa forzada: «Mi caída ha sido monumental. No sé qué me ha pasado».

El mal ambiente reinó durante todas las pruebas de la noche, desde el inicio del programa cuando se acusaron de haber tomado el diario de una compañera y romperlo. Sin embargo, al final, su equipo salió victorioso y subieron a la pasarela para ver cómo los delantales negros luchaban una semana más por permanecer en las cocinas de 'MasterChef'. La tensión aumentó cuando se entregaron rosas que restaban 10 minutos a un concursante durante la prueba de expulsión. En este caso, Pilu recibió la rosa de manos de Claudia, lo cual generó molestia: «Las palabras me molestan. No sé si fue por el espectáculo, pero me dolió y no pude evitar quedarme callada».

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