Así debes limpiar tus grifos (por dentro y por fuera) si bebes agua de ellos

En nuestras casas existen lugares que son difíciles de alcanzar y no suelen ser limpiados con la frecuencia adecuada, lo que puede convertirse en un foco de bacterias, gérmenes, alergias y otros problemas de salud. Uno de los lugares más olvidados son los grifos de la cocina y el baño, que también necesitan ser limpiados para evitar la acumulación de cal en el exterior y, lo que es más importante, en el interior, además, si bebes agua del grifo, es uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta.

La acumulación de cal en las cañerías y en los grifos, especialmente en la parte de la llave, puede obstruir el flujo de agua y reducir la presión. La mayoría de las veces, se confunde con fugas o desperfectos, cuando en realidad se trata de una acumulación de cal. Para solucionar este problema y mejorar la presión de agua, se puede utilizar vinagre blanco.

Para limpiar los grifos de la cocina por dentro, se debe desmontar la boquilla y frotar con vinagre y un cepillo. Si el grifo no se puede desmontar, se puede llenar una bolsa de plástico con vinagre, cubrir la boquilla y sujetarla con una goma elástica durante toda la noche. Al día siguiente, se enjuaga y se observa cómo la cal se ha deshecho.

Aunque a menudo pasan desapercibidos, limpiar los grifos por dentro es importante para mantener una buena calidad de agua y prevenir problemas de salud si bebemos de ellos. Por lo tanto, se recomienda incluir esta tarea en la rutina de limpieza del hogar para asegurar una higiene adecuada en todas las áreas de la casa.

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