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Cinco días después del gravísimo percance que sufrió el pasado domingo en la plaza de toros de Cuéllar (Segovia), y gracias a la buena evolución, el equipo médico que atiende a Manuel Diosleguarde ya ha determinado el pase a una habitación de planta del hospital Clínico Universitario de Valladolid, donde seguirá ingresado aún en los próximos días y donde llegó en estado muy grave el domingo por la noche. Allí, después de cuatro jornadas en la Sala de Reanimación (REA) del citado medico hospitalario de la capital vallisoletana, el joven diestro salmantino continuará la recuperación de la terrorífica cornada que le infirió un toro de la ganadería de José Cebada Gago en el tercio medio del muslo derecho, que afectó a la vena y a la arteria femoral y que a punto estuvo de costarle la vida, si no es por las prodigiosas manos de la cirujana Marta Pérez y de la intervención inmediata en la enfermería de la propia plaza de toros del citado coso segoviano. Allí fue intervenido de urgencia para ser estabilizado, y trasladado de urgencia al hospital Clínico Universitario de Valladolid donde fue operado de nuevo en una intervención que se prolongó durante seis horas aquella madrugada. El lunes por la mañana entró de nuevo al quirófano en una tercera intervención.
Durante toda la semana la evolución ha sido buena, no han surgido complicaciones y esta misma mañana los doctores que le atienden han autorizado trasladarlo a una habitación de planta del mismo centro hospitalario para continuar la recuperación.
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