

Secciones
Destacamos
Admirable y sorprendentemente Damián Castaño se montó en el coche ayer después de comer y puso rumbo a Gijón desde Salamanca para recoger el premio al torero revelación de la temporada 2024 y compartir una velada con los miembros de la Peña Astur. Algo que sería normal, y actividad propia de la «temporada de invierno» de los toreros, si no fuera porque el domingo un toro de Adolfo Martín le corneó gravemente al torero salmantino en su actuación en la plaza de Las Ventas. Sería normal si no fuera porque el miércoles, hacía solo dos días, recibió el alta hospitalaria de la clínica de la Fraternidad de Madrid para seguir su recuperación en su domicilio de Salamanca, y porque aún tiene la parte posterior del muslo izquierdo cosido con grapas para cicatrizar una herida que hubiera dejado en el lecho del dolor varias semanas a cualquier mortal.
Damián Castaño ya tiene un nuevo premio para sus vitrinas, tiene la admiración de los aficionados, y tiene también la añoranza del recuerdo de su paso por El Bibio de Gijón, donde tomó la alternativa el 14 de agosto de 2012 de manos de su hermano Javier, saliendo a hombros después de cortarle las dos orejas al toro de su alternativa, Buzonero, de El Conde de Mayalde. Injusticias del toreo desde aquel triunfo, Damián Castaño no ha vuelto a torear más en Gijón, donde anoche recogió el apoyo, el reconocimiento, el cariño y la admiración de la Peña Astur de esta ciudad asturiana.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.