Capea también carga contra el Gobierno: “Esto lo hace el lobo”

Mientras siguen arreciando las críticas contra el Gobierno por prohibir la caza del lobo, los ganaderos continúan sufriendo las consecuencias de sus ataques. El último ha sido Pedro Gutiérrez Moya, “El Niño de la Capea”, que este sábado denunciaba el “desastre” que supondrá para el campo la nueva ley del Ministerio para la Transición Ecológica, tras descubrir a uno de sus becerros muertos en su finca de San Pelayo de Guareña.

“Es la primera vez que voy a denunciar un ataque, aunque hemos sufrido muchísimos durante años, y lo voy a hacer porque la nueva ley va a ser un desastre para la ganadería extensiva. Da igual que sea de bravo, ovino, porcino... No se puede permitir”, aseguraba cansado de un problema que sufren desde siempre en “Espino Rapado”.

“Nunca habíamos denunciado los ataques y directamente dábamos por desaparecidos a los animales, pero no podemos dejar que los lobos campen a sus anchas porque sería el fin de los ganaderos”, insistía.

El veterano matador salmantino recordaba además que la Junta de Castilla y León ya autorizó en su día la caza de un ejemplar en la zona donde se ubica su finca por el daño que estaban causando los cánidos. Algo que sigue reclamando también ahora en aquellas comarcas donde las poblaciones están descontroladas.

“Yo no quiero que desaparezcan los lobos. Solo pido que siga habiendo un control por parte de las autoridades, que son las que tienen que actuar”, reclamaba el maestro, sin esconder su enfado por el desamparo que sufren en este momento los ganaderos y el campo en general. “Que siga habiendo lobos, pero controlados”, pedía el matador salmantino, para quien las cacerías de ejemplares autorizados por la Junta son necesarias para poder mantener la convivencia entre ganaderos y cánidos.

“O denunciamos esta situación que estamos sufriendo o, con los problemas que estamos teniendo además con la pandemia, la ganadería acaba por desaparecer en este país”, lamentaba.

También la ganadera Conchita Hernández, del hierro salmantino de Domingo Hernández, denunciaba recientemente el daño que los lobos están causando en su finca de Juarros, en Chagarcía Medianero, después de perder a más de 60 animales, entre becerros, añojas bravas y cerdos ibéricos, tan solo durante el pasado año.

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