Invasión de móviles en la cárcel de Topas: diminutos, indetectables y en manos de cualquier recluso
M. C. | SALAMANCA
En cinco años se han decomisado más de 200 terminales, el último la semana pesada entre los calcetines de un interno. ACAIP-UGT avisa: «Son más pequeños que un mechero y se mueven por toda la prisión». Alertan de la gravedad de la situación y urgen tecnología avanzada para su detección