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Sábado, 3 de agosto 2019, 16:46
La gran mayoría de personas carga su teléfono móvil al menos una vez al día. Se trata de una acción sistemática en la que la mayoría de personas no se paran a pensar. Sin embargo, muchos de nosotros realizamos prácticas que dañan notablemente el terminal y con las que el cargador nuestro dispositivo podría llegar a explotar. Esto es algo que ya ha ocurrido en diversas ocasiones y muchas veces supone un peligro para el usuario del teléfono móvil.
Uno de los primeros consejos se trata de utilizar un cargador auténtico a pesar del elevado coste de estos. Lo ideal es tratar de conservar el que se incluye en la caja del terminal o, en caso de pérdida, comprar uno original. Un cargador más barato y que no cuenta con la calidad adecuada podría llegar a explotar, como ya ha sucedido en numerosas ocasiones. Una de las más recientes ha ocurrido el pasado mes, en Valladolid, cuando los bomberos tuvieron que intervenir porque la explosión de este originó un fuego en una vivienda.
Pregunta, ¿como puede incendiarse tu colchón?......:⬇ï¸â¬‡ï¸â¬‡ï¸â¬‡ï¸
— BomberosValladolid (@BomberosVLL) July 1, 2019
Hoy en #calleHernandoDeAcuña pic.twitter.com/IqnaOITmeL
Por ello, debemos pensarnos dos veces si comprar un cargador más barato ya que podría acarrear un peligro. Además, muchos de estos cables no han pasado las pruebas de calidad, controles de seguridad o incluso no sean del todo compatibles con el terminal. Otra de las consecuencias más comunes es el daño que supone para la batería del teléfono móvil que se cargue.
Sin embargo, si prefieres continuar utilizando un cargador que no sea original, estas son las señales que indican que algo va mal y que debes tener en cuenta para evitar daños de consideración o incluso que tu cargador llegue a explotar:
- Al cargarse, el dispositivo emite un ruido excesivo fuera de la normalidad.
- La batería del terminal se ha hinchado y la parte posterior está abultada.
- Al coger el teléfono mientras está enchufado, recibes una pequeña descarga eléctrica.
- La carga del dispositivo es excesivamente lenta y tarda más de lo habitual.
- Problemas a la hora de utilizar la pantalla táctil del teléfono. Esto podría significar que el móvil recibe una carga excesiva.
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