Sin rastro del desaparecido en Arquillinos doce días después

C. L. S.

Salamanca

Domingo, 6 de abril 2025, 13:07

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Sin rastro de Carlos Javier López Vecilla doce días después. Se le perdió la pista el pasado 26 de marzo en la localidad zamorana de Arquillinos y a pesar del amplio dispositivo de búsqueda— en el que participan los servicios de emergencias, la Guardia Civil de Salamanca y los Bomberos de la Diputación—, continúa en paradero desconocido.

El desaparecido tiene 53 años, mide 1,65 metros de altura, pesa 70 kilos aproximadamente, tiene el pelo canoso y los ojos marrones.

Su vehículo—Opel Astra de color azul oscuro— fue hallado el pasado domingo, 30 de marzo, sobre las 11:00 horas en las inmediaciones de la presa de Almendra, en el límite entre Salamanca y Zamora, lo que ha centrado los trabajos de rastreo en esta zona. El coche estaba vacío y no presentaba ningún signo de violencia. Este hallazgo ha focalizado el rastreo en esta zona, considerada de difícil acceso y gran extensión.

La familia de Carlos Javier denunció su desaparición el sábado 29 de marzo. Desde entonces, la Guardia Civil ha activado el protocolo correspondiente, clasificando el caso como de riesgo elevado. Actualmente el operativo de búsqueda se ha intensificado y el caso ha sido declarado de alta vulnerabilidad.

Según ha podido saber LA GACETA por fuentes vecinales, Carlos Javier se sentía muy apenado y solitario desde el fallecimiento de su madre. Por lo que la hipótesis dominante se centra en el agua, aunque las autoridades no descartan ninguna.

Para coordinar los esfuerzos de localización, la Guardia Civil ha instalado un puesto de mando avanzado en la zona. El dispositivo de búsqueda cuenta con la participación de la Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia (USECIC) de Salamanca y Zamora, el Seprona de Zamora, perros especializados del Servicio Cinológico de búsqueda de personas, el equipo de drones Pegaso y Unidad Fénix y la Oficina Móvil de Atención al Ciudadano de Salamanca (OMAC). Asimismo, se ha solicitado la intervención del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil de Madrid y la zona de Castilla-La Mancha y la Unidad Aérea de la Guardia Civil.

En el rastreo también han participado una dotación del Parque de Villares de la Reina y otra de Ledesma, que partieron hacia la presa de Almendra el pasado lunes. Estos equipos cuentan con embarcaciones y el material necesario para llevar a cabo la búsqueda en el agua. Así como helicópteros de la Junta de Castilla y León, Protección Civil y Cruz Roja, entre otros.

La presa de Almendra, que se construyó sobre el río Tormes, tiene una profundidad máxima de 200 metros, una longitud de 567 metros y una superficie de 8.650 hectáreas. Es la más alta de España y una de las más profundas, lo que provoca que la visibilidad bajo el agua sea reducida y complique el rastreo subacuático. Aunque los GEAS han continuado con las sumersiones gracias a la tecnología sonar (un sistema que usa ondas sonoras para detectar objetos y medir distancias en el agua) y cámaras sumergibles.

Las autoridades continúan trabajando intensamente en su búsqueda con la esperanza de encontrarlo lo antes posible mientras que los familiares y amigos de Carlos Javier se mantienen en vilo. Cada minuto es crítico.