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Martes, 27 de septiembre 2022, 21:52
El acusado de enfrentarse a la Policía para impedir que detuviera una ruidosa fiesta en un piso de la calle Gran Capitán de la ciudad ha aceptado una condena de seis meses de prisión por un delito de atentado y 180 euros de multa por otro delito leve de lesiones. Según ha podido saber LA GACETA, el Juzgado de lo Penal número Dos de Salamanca acogió este martes el juicio por el que el acusado, de iniciales H.A.Q.B., indemnizará además a un agente que resultó lesionado en 560 euros.
Según relata el relato del fiscal, los hechos se remontan al 2 de mayo del pasado año, sobre las 23.30 horas, cuando dos agentes de la Policía Nacional fueron a un edificio del paseo de Gran Capitán tras llegar un aviso en la central por ruidos excesivos procedentes de una fiesta o similar en un piso.
Al llegar, oyeron que efectivamente había ruido de una fiesta en uno de los edificios y tras abrirles la puerta el alertante, llamaron al domicilio en cuestión.
Una mujer les abrió y les facilitó el acceso, comprobando que en su interior había varias personas, todas ellas con síntomas claros de embriaguez. Todos ellos tenían actitudes de desprecio y contestatarias contra los agentes, que les pedían identificación y que cesara la fiesta.
El más significado por esta actitud, H.A.Q.B., se mostró especialmente agresivo y despectivo con ellos, llegando a agarrarse a las piernas de uno de los agentes, intentando morderle reiteradamente, y a provocarle un esguince en un dedo de una mano.
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