El fugitivo albense acosó a otro conductor en Valdelagua, intentó atropellar a un guardia civil en Calvarrasa y trató de ahorcarse con un pantalón en el calabozo

El albense que este jueves ingresó en prisión tras dos temerarias fugas en dos meses acosó a otro conductor en Valdelagua, trató de atropellar a un guardia civil en Calvarrasa y de ahorcarse con un pantalón en el calabozo. Las pruebas de alcoholemia que le realizó la Guardia Civil a S.A.C.M. tras su arresto arrojaron un resultado de 0,88 mg/l de alcohol en aire espirado, casi cuatro veces la tasa permitida.

Según ha podido saber LA GACETA, los hechos tuvieron lugar este miércoles, a última hora de la tarde, cuando los agentes recibieron aviso de que en la carretera CL-510, a la altura de la glorieta de entrada a la urbanización Valdelagua, un BMW de color gris estaba acosando al vehículo que le precedía, llegando casi a colisionar con él.

Una patrulla acudió al lugar y al llegar les informan de que el turismo se había metido en la gasolinera ‘El Trébol’ de Calvarrasa de Arriba.

Una vez allí, uno de los agentes se dirigió al vehículo, que solo iba ocupado por su conductor, quien al verle aceleró intentando atropellarle, llegando el agente a hacer uso de la defensa reglamentaria y a golpear en la ventanilla del conductor y en una aleta de su vehículo.

El temerario conductor se incorporó entonces con su coche a la carretera CL-510 sin respetar la preferencia de paso de los vehículos que iban por la vía principal de modo que un turismo tuvo que dar un volantazo para evitar colisionar con el vehículo infractor.

Las patrullas de la Guardia Civil salieron tras el BMW fugado haciendo uso de las señales acústicas y visuales en todo momento, sin que el BMW gris se detuviera, todo lo contrario circulaba a gran velocidad e infringiendo la normativa.

El coche se adentró entonces en la urbanización El Encinar (Terradillos), donde en un momento dado el conductor salió del vehículo y prosiguió su fuga a pie, siendo perseguido por uno de los agentes.

En su huida, intentó acceder a un domicilio, sin que le permitiera entrar su propietario, tras lo que los agentes procedieron a su detención y traslado a las dependencias del Instituto Armado.

Durante la detención e identificación, S.A.C.M. se golpeó contra las paredes y el suelo a base de cabezazos, patadas y puñetazos e intentó ahorcarse con un pantalón.

Tras pasar la noche en el calabozo, a la mañana siguiente pasó a disposición del Juzgado de Guardia. Ante el magistrado aseguró que huyó porque “se asustó” y que no sabía que las patrullas le iban siguiendo porque “cuando conduce mira para adelante y las patrullas iban detrás”.

Debido a la gravedad de los hechos y el riesgo elevado de reiteración delictiva, habida cuenta de que en el mes de febrero protagonizó otra fuga de película en el barrio de San José, el juez ordenó su ingreso inmediato en prisión, tal y como había instado la Fiscalía.

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