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Jueves, 2 de enero 2020, 13:41
Un salmantino de 39 años ha sido detenido por abordar a una compañera de piso, de nacionalidad china y de 23, con los pantalones bajados e intentar agredirla sexualmente tras espetarle algo así como: “Tú y yo juntos esta noche”. Los hechos tuvieron lugar a última hora del lunes 30 de diciembre en un céntrico domicilio de Salamanca que ambos compartían con otras personas y por suerte, la víctima consiguió zafarse y salir al pasillo pidiendo auxilio a gritos hasta que un compañero salió en su ayuda. Agentes de la Policía Nacional detuvieron instantes después al presunto agresor sexual, al que sorprendieron bebido y amenazando de muerte a gritos a la joven y al compañero que la auxilió.
Según ha podido saber LA GACETA, cuando los agentes llegaron al lugar indicado, encontraron al presunto agresor frente al portal de la vivienda que además de proferir en reiteradas ocasiones graves amenazas e insultos contra sus compañeros de piso, portaba entre sus ropas unas tijeras. Llevaba los pantalones desabrochados, con la bragueta abierta y el cinturón mal puesto.
Cuando se entrevistaron con la joven, ésta les contó lo que acababa de ocurrir. Muy nerviosa y todavía asustada, les dijo que estaba en el salón con el ordenador, mientras que el presunto agresor sexual bebía cerveza en el sofá y comenzó a decirle que tenían que pasar la noche juntos.
Acto seguido, él se levantó, apagó la luz y cerró la puerta del salón, ante lo que la chica se asustó y encendió de nuevo la luz.
Fue en ese momento cuando se dio cuenta de que el varón, que llevaba los pantalones bajados y que tenía su miembro fuera, se acercaba a ella hasta que consiguió agarrarla fuertemente por un brazo, diciéndole cosas del tipo: “Tú y yo juntos esta noche”. Palabras que, sin embargo y probablemente por no ser su idioma, no lograba comprender muy bien.
La joven consiguió entonces zafarse de su agresor y correr hasta salir al pasillo, desde donde pidió auxilio a gritos.
En ese instante, otro compañero de piso salió de su habitación e impidió que el atacante, que trataba de alcanzarla, llegara a acercarse a ella. La joven se encontraba muy asustada y no paraba de llorar.
El varón que auxilió a la víctima, con la ayuda del resto de compañeros de piso, logró retener al individuo hasta la llegada de la Policía Nacional, que dado el estado de agresividad y ante la gravedad de los hechos acabó deteniéndole y llevándole a los calabozos de la calle Jardines, por un presunto delito sexual.
El arrestado, que se acogió a su derecho a no declarar ante los efectivos policiales, pasó la última noche del pasado año y la primera del presente en los calabozos policiales, tras lo que pasará a disposición del Juzgado de Instrucción número Cuatro de Salamanca, en funciones de guardia.
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