La fruta de moda para perder peso sin pasar hambre

Dejamos atrás las navidades y toca ponerse serio. Los excesos de estos días han tirado por tierra la dieta para perder peso que estábamos llevando. Es normal, no vamos a sentarnos a la mesa de Nochebuena o Navidad y decir que solo queremos comer brócoli, pescado hervido, pavo y una naranja. No pasa nada, es normal. Lo importante es afrontar la ‘cuesta de enero’ con una actitud renovada. Toca perder los kilos que hemos sumado y seguir una dieta saludable y equilibrada. Eso sí, tiene que estar complementada con un ejercicio diario y constante que nos saque del sendentarismo que tanto nos gusta.

A la hora de plantearnos una dieta para adelgazar, la fruta tiene que ocupar un papel capital. No hay que hacer caso a los cantos de sirena que intentan tirar por tierra a la fruta asegurando que tiene excesivas calorías. De hecho, una fruta repleta de propiedades como es la manzana, puede servir para sustituir la chocolatina o la bolsa de patatas fritas que a veces nos comemos a media mañana o por la tarde en el trabajo.

¿Cuál es la razón de que la manzana esté de moda? Apenas tiene calorías y puede suponer una gran ventaja para tu organismo. No en vano dicen los viejos dichos que el que come una manzana al día aleja a los médicos y padece menos enfermedades. Recuerda que lo importante es siempre llevar una alimentación sana y equilibrada. Y es que una de las mejores modas que ha surgido en los últimos años (sobre todo si quieres perder peso), es la de comer comida real, no ultraprocesdos. Pero las ventajas no acaban ahí. De hecho gracias a este pequeño truco puedes sumar otra de las cinco piezas de fruta y verdura que según los nutricionistas tienes que comer todos los días.

Pero no son estos los únicos consejos que puedes seguir en tu día a día, ni mucho menos. Hay dos cosas que tienes que tener en cuenta: es más que importante que te fijes sobremanera en el desayuno y en la cena. En el primer caso para renunciar al azúcar. Tienes que empezar el día con (a ser posible) comida salada que no aumente la glucosa en tu organismo y no te engorde. Además tienen que ser productos que te “llenen” y te “sacien” para que no sientas hambre a mediodía. Y la cena también es importante. (Aquí puedes leer cómo se hace el té quemagrasa de moda).

Acabar el día de buena manera en lo que a alimentación se refiere es más que importante. ¿La razón? La última comida del día debes hacerla moderada: no vas a gastar más calorías por lo que tampoco necesitas comer mucho más. Tampoco tienes que comer con alcohol ni con refrescos azucarados. Sino con esa gran cantidad de calorías líquidas que ingieres estarás tirando a la basura todo lo que has conseguido ganar (o más bien dicho perder) a lo largo de la jornada.

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