¡Cuidado con tomar estos medicamentos en pleno verano!

El verano es una de las épocas en las que hay que tener cuidado con tomar algunos medicamentos, especialmente los fotosensibles, que son fármacos que deben protegerse de la luz para evitar su deterioro, ya que pueden verse alteradas sus propiedades físico-químicas y farmacológicas. Por ello suelen almacenarse en envases opacos.

Por otro lado están los fotosensibilizantes, que son aquellos que combinados con radiaciones ultravioletas provocan una reacción cutánea anormal. Entre los más destacados de este tipo se encuentran los antidepresivos (fluoxetina o paroxetina), antiinflamatorios como el ibuprofeno, antihistamínicos, especialmente las cremas con antihistamínicos tópicos como la difenhidramina, usada para las picaduras de mosquitos; el omeprazol, anticonceptivos orales, o diuréticos, entre otros.

Además, existen otros tipos de fármacos que también pueden producir reacciones adversas, como es el caso de algunos cosméticos que presenten colorantes, esencias de limón o lavanta o ácido glicólico. Estos se recomiendan usarse por la noche y aplicarse una alta protección solar por el día.

En conclusión, la fotosensibilidad por estos medicamentos puede provocar dos tipos de reacciones adversas cutáneas:

- Fototóxicas: Son las más frecuentes. Aparece tras la exposición solar con quemaduras, sensación de ardor y ampollas o urticarias. Todo también depende de cada persona y cada piel.

- Fotoalérgicas: Son más extrañas de ver. Aparecen en personas con dosis bajas del medicamento por activación del sistema inmune y tras varias horas de la exposición del sol en forma de dermatitis, hinchazón o picores.

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