El secretario general de la confederación de empresarios CEOE-Cepyme Salamanca, Víctor Yenes, ha acudido este viernes a su puesto de trabajo, un día después de que el comité ejecutivo le comunicara su despido, una decisión irregular al no haber recibido el visto bueno de la asamblea general, tal y como establecen los estatutos de la organización.
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El técnico ha llegado acompañado por algunos empresarios, socios de la confederación, para acceder a su despacho sin hacer declaraciones.
Cabe recordar que el comité ejecutivo comunicó este jueves que prescindía del secretario tras la celebración de una reunión extraordinaria, decisión que adopta «por pérdida de confianza» y tras valorar diversos aspectos relativos al desempeño de su cargo, «incluyendo el incumplimiento de ciertas obligaciones básicas» que habrían llevado a la adopción de esta medida.
Curiosamente el despido se comunica 10 días después de que un grupo de empresarios exigiera conocer en el último consejo directivo qué poderes y responsabilidades se han otorgado al nuevo director general, Ricardo Andrés, así como su salario y condiciones laborales ante la sospecha de que estaba usurpando las del secretario general.
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