«Siento orgullo del avance de la capital hacia la innovación»

El alcalde, Carlos García Carbayo, otorgó este lunes el título de Huésped Distinguido a tres personalidades vinculadas al ámbito científico y sanitario: el investigador Adolfo García Sastre, el vicepresidente del Instituto Rui Barbosa, Sebastião Helvecio Ramos de Castro; y la bisnieta de Santiago Ramón y Cajal, María Urioste Ramón y Cajal. El reconocimiento se enmarca en la segunda edición de «Salamanca: por Cajal y la Ciencia», que se celebrará este martes en el Teatro Liceo.

Durante el acto, Carbayo destacó la trayectoria de cada uno de los homenajeados. De Adolfo García Sastre, resaltó su formación en la Universidad y su importante labor en el desarrollo de vacunas y en la lucha contra los patógenos virales. Sobre Sebastião Helvecio Ramos de Castro, subrayó su capacidad para trasladar su pasión por la Medicina a la política, impulsando medidas efectivas en la salud pública.

Por último, en referencia a María Urioste Ramón y Cajal, recordó el legado de su bisabuelo, el premio Nobel Santiago Ramón y Cajal, «una figura clave en la neurociencia». El evento sirvió para poner en valor la actividad científica de Salamanca. El primer edil destacó el papel de las universidades y centros de investigación como el Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (IBSAL), el Irnasa, el Centro de Investigación del Cáncer y el Instituto de Neurociencias de Castilla y León.

Además, resaltó el crecimiento del sector biotecnológico en la ciudad y el apoyo a los jóvenes investigadores y emprendedores. Incidió en que las jornadas «Salamanca: por Cajal y la Ciencia» buscan fomentar el interés por la investigación y rendir homenaje a figuras clave en el avance del conocimiento científico, referentes para los nuevos investigadores.

El catedrático de Medicina y Microbiología, así como codirector del Global Health & Emerging Pathogens Institute y del Icahn School of Medicine at Mount Sinai en Nueva York, se formó en la Universidad de Salamanca, ciudad en la que «vivió los mejores años de su vida». Es reconocido internacionalmente por sus investigaciones centradas en mejorar las vacunas contra el virus de la gripe.

Este lunes confesó, tras ser nombrado huésped distinguido de Salamanca, que se siente orgulloso de la nueva dirección que ha tomado la ciudad, apostando por la innovación, así como de las colaboraciones de las universidades con la industria. «Vivimos un momento de innovación increíble», avanzó el investigador en relación a los logros que se esperan en técnicas diagnósticas de enfermedades, además de en la solución a procesos como el cáncer y las patologías autoinmunes. «Que desde aquí se impulse la ciencia es algo encomiable», consideró, para advertir de que los avances en biología e inteligencia artificial propiciarán un futuro prometedor «del que Salamanca formará parte».

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