«Si Shakespeare existiera en la actualidad, le hubiera dedicado varias obras al rey Juan Carlos»

La mítica y reconocida compañía de teatro 'Els Joglars' llega al escenario salmantino con 'El rey que fue', una obra que muestra al rey Juan Carlos en el momento actual, con sus puntos fuertes y sus puntos más débiles, un emérito más íntimo y que da su visión. El actor Ramón Fontserè es el encargado de encarnar al que fue rey de España y, bajo la dirección de Albert Boadella, narrarán hoy y mañana en el Teatro Liceo a las 21:00 horas esta historia.

¿Qué se va a encontrar el público en esta obra?

Se va a encontrar con la figura del rey emérito desde un punto de vista realista. Nos hemos puesto en un momento concreto de su vida, que es el momento actual, y lo hemos situado en una goleta. Lo hemos ubicado en el golfo pérsico y podemos ver en este espacio su forma de actuar, sus cualidades, sus defectos y también cómo se defiende y damos la oportunidad de que él se explique. Podemos ver quizás la parte más íntima del rey. Siempre lo hemos visto a través de actos oficiales, pero de esa manera más íntima va saliendo de otra manera.

Es un momento en el que el rey Juan Carlos está en el ojo del huracán con todo lo que está saliendo. ¿Cómo puede afrontar el público todo esto en este momento?

Todo esto creo que es algo que todo el mundo sabía porque supongo que es un material muy goloso. Se sabía de sus aficiones y, sobre todo, esta cosa de creerse impune. Las monarquías actuales son distintas. Él se cree un monarca, digamos, a la antigua, que no ha sabido reciclarse a los tiempos actuales. Al principio, tenía el escudo de que no había ningún periodista en España que se atreviera a contar lo que hacía, hasta que poco a poco los medios fueron cada vez menos indulgentes.

¿Cómo ha sido para usted interpretar este papel?

En esta casa es algo que solemos hacer, porque hemos hecho otros personajes, desde Puyol a Pla o a Franco. La vida de este hombre es un material dramático importantísimo. Si Shakespeare o Molière hubieran existido en la época actual, hubieran dedicado varias obras a este personaje, porque desde que es niño hasta ahora en el exilio y en la soledad, su vida ha sido una tragicomedia. Ha sido una vida llena de contrastes, desde niño hasta ahora.

¿Cómo ha sido la preparación?

Hoy en día, con tan solo consultar documentales o libros te puedes informar para llevarlo al escenario. Ha sido una inmersión en la vida de este hombre y en la historia de España. Pase lo que pase creo que es un personaje esencial. Es el que trajo la democracia a España. Si hoy vamos a votar, algo tiene que ver este hombre. También seguir un poco la trayectoria de los Borbones, de Alfonso XIII, de Isabel II, hasta llegar a Juan Carlos.

'Els Joglars' está acostumbrado a tener obras que tiran hacia la crítica. ¿Cree que en este país se lleva bien la crítica y la sátira?

Al poder nunca le ha gustado la crítica. Los cómicos y el poder nunca se han llevado bien, ya desde los tiempos de Aristófanes, cuando dedicaba obras al gobernador de Atenas. Es uno de los elementos que tenemos que abordar los cómicos. Es decir, ser notarios de lo que nos envuelve y cuando hacemos esto, lanzarnos como un tigre por todas las consecuencias. Yo creo que es una visión, la de los cómicos, muy importante porque es la que se acerca más a la verdad y la que la gente creo que piensa pero que no se atreve a decir. Por eso, la catarsis en el teatro y en nuestros espectáculos es muy importante y eso se produce en nuestros espectáculos porque el espectador se ve reflejado en el escenario y dice lo que en cuerpo ajeno.

La compañía de teatro lleva desde los años 60 en los escenarios, ¿cómo ha evolucionado?

Ha ido evolucionando, empezando con el teatro desnudo, es decir, haciendo mimo con unas mallas, sin palabras, no había prácticamente nada. Luego, se fue introduciendo un grito, una onomatopeya, luego un par de páginas de texto, hasta llegar a un borrador de 100 páginas. Siempre hemos tenido la sociedad y el mundo que nos rodea como inspiración, no hay cosa más imaginativa ni más fantástica que la realidad. Y siempre con el humor, con la ironía y con un trabajo artístico de meses de ensayo que creo que es uno de los elementos fundamentales que esta compañía haya durado ya 62 años.

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