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Sábado, 10 de septiembre 2022, 00:08
Con la vuelta de los conciertos gratuitos a la Plaza Mayor de Salamanca, la Policía Local ha reforzado el sistema de videovigilancia que ya estaba instalado en el casco histórico para vigilar atentados contra el patrimonio histórico con más cámaras.
Concretamente, se han instalado otros cinco aparatos en el ágora, según fuentes municipales, equipos de los que se sirven los agentes municipales para controlar que no se superan los aforos máximos permitidos para el monumento —16.000 personas si se permite a los bares mantener dos filas de mesas, y 20.000 personas si se retiran completamente las terrazas—.
Cuando a través de este sistema de videovigilancia y conteo se detecta que se han excedido los límites de personas acordados en la reunión de la Junta Local de Seguridad, los policías cortan el paso en las entradas de la Plaza hasta que parte del público que se encuentra en el interior comienza a abandonar el monumento.
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