Un referente en ingeniería hidroeléctrica y turismo

Las maravillas de Aldeadávila de la Ribera pasan por impactantes panorámicas desde miradores y famosos saltos que abren al turista ventanas al vacío que parecen sacadas de una novela de fantasía. La emblemática presa de Aldeadávila bombea esta magia hacia cada vista cortando el aliento; una presa que maravilla a los ingenieros y libera un gran poder, convirtiéndose en la central hidroeléctrica más productiva de España.

Aldeadávila I y Aldeadávila II constituyen un referente en Las Arribes y concretamente en Aldeadávila de la Ribera. Durante la construcción de Aldeadávila II llegó a haber 1.800 empleados volcados en este hercúleo proyecto y el municipio rebosaba una vida que el Consistorio añora, motivo por el cual atraer visitantes se ha convertido en una meta fija.

«Aldeadávila no está de paso, es un destino en sí mismo y, por ello, hay que ofrecer estímulos potentes», sugiere Florentino García, cuyo equipo de Gobierno ha tomado las riendas del pueblo con la ilusión de nuevas iniciativas en torno a los principales atractivos de la zona. «Había mucho comercio y negocios; ahora hay algo de trabajo y movimiento en la propia central, por mantenimiento, se genera trabajo, pero ni parecido a los que había en su día», recuerda.

El entorno natural es un regalo que el Ayuntamiento aprovechará en la legislatura para poner en valor el pueblo: «Aldeadávila debe ser el corazón de Las Arribes; referencia en toda la comarca, por cuestiones económicas, paisajísticas...» Para atraer esa ansiada vida el Consistorio trabaja ya en ferias y mercadillos que el alcalde denomina «Corazón de Las Arribes».

Anteriores ediciones de ferias en Corporario han cosechado un gran éxito con más de una veintena de expositores. «El 20 de agosto fue la primera en Aldeadávila, y el 15 de septiembre se hizo la segunda, que iba a contar con 40 expositores, aunque por desgracia el clima impidió que pudieran participar todos los que estaban previstos». Aún así, la acogida fue espléndida, y en el horizonte se visualiza el arraigo de esta feria. «Quiero que perdure y se celebre el tercer domingo de cada mes». El título, «Corazón de Las Arribes», no podría ser más evocador. De este modo, el comercio y la vida regresan periódicamente al municipio arribeño por excelencia.