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Un recorrido por las publicaciones de la Edad Media hasta las del siglo XV es lo que presenta la nueva exposición que ha inaugurado la Universidad en la sala de la columna en el Patio de Escuelas Mayores bajo el título 'A Imagen y Semejanza. La Historia del libro a través de ediciones facsimilares. De los códices a los incunables'.
Este proyecto, organizado por la Biblioteca General Histórica, en colaboración con la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación de la Universidad de Salamanca, presenta un total de 25 facsímiles que reproducen la historia del libro y que, en esta ocasión, recorren la Edad Media, con códices medievales, hasta llegar al final del siglo XV, con la llegada de la imprenta. En esta presentación estuvieron presentes el vicerrector de Transferencia, Innovación y Emprendimiento Federico Bueno de la Mata y la directora de la Biblioteca General Histórica, Margarita Becedas.
«La palabra facsímil significa etimológicamente 'hazlo igual'. No son publicaciones originales, es cierto, pero no por eso muchas veces no son menos exclusivos», apuntó Margarita Becedas. «Hemos seleccionado algunos de toda la Edad Media hasta llegar a finales del siglo XV, cuando ya la imprenta con tipos móviles llevaba ya meses trabajando y haciéndose cada vez más madura y sobre todo expandiéndose rápidamente por Europa», añadió.
De estas 25 representativas piezas expuestas, once son manuscritos, seis de ellos de la Universidad de Salamanca, y catorce incunables, de los que también cuentan con alguno en la propia Universidad.
La exposición muestra por dónde debe empezar el espectador a ver los facsímiles expuestos, comenzando por orden cronológico con los códices medievales religiosos. «La cultura escrita se refugió en los monasterios y era el único lugar donde se podía encontrar libros manuscritos y por la general de tipo religioso», apunta la directora de la Biblioteca. En esta primera toma de contacto con la época medieval, se pueden ver el 'Comentario al Apocalipsis'de Beato de Liébana, cuyo original está en la Biblioteca Nacional, el Códice Calixtino o las 'Cantigas de santa María'. La muestra también cuenta con una copia de la primera obra literaria en castellano por excedencia que es el Poema del Mio Cid o con el Libro del buen amor.
Entre las incunables, se pueden ver obras como la primera biblia de Gutenberg o el primer tratado del ajedrez moderno, entre otras obras. El recorrido concluye como empezó, con el 'Apocalipsis' de Alberto Durero.
«Creemos que esta exposición es útil para nuestro objetivo, que es el de empezar a comprender el recorrido histórico del libro y la importancia de cada una de las obras emblemáticas expuestas», apuntó Margarita Becedas.
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