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El Cabildo de la Catedral embellecerá las portadas de sus accesos principales con el objetivo de mejorar el aspecto exterior con una intervención integral en todos sus accesos. Los trabajos tendrán una labor de limpieza superficial que se completará con la pintura y la restauración de grietas y fisuras que puedan afectar al elemento de madera. Las labores de pintura se están realizando con suma minuciosidad con el uso de pinceles finos para garantizar la mayor precisión.
La intervención se ha iniciado en la portada de madera del Patio Chico, un acceso exterior muy visitado por el turismo pero con poco uso salvo para labores de transporte y de logística. Por ejemplo, en Semana Santa es la entrada reservada para los cofrades que participan en la procesión de 'La Borriquilla' de la Hermandad de Jesús Amigo de los Niños. Los accesos a la Catedral Vieja serán los primeros en completarse con la puerta de Santa Lucía —entrada a través de la calle Tentenecio— y el acceso principal.
Los trabajos continuarán por la Puerta del Obispo —lugar por el que salen varias hermandades en Semana Santa—, la Anunciación y las portadas de Ramos y la ubicada en el crucero. Los trabajos han requerido del visto bueno de la Comisión Territorial de Patrimonio y están siendo ejecutados por la empresa especializada en restauración del conjunto monumental salmantino 'Carlos Riesco' que ya se encargó de la restauración de la Capilla de Santa Catalina o de los trabajos sobre la Torre de las Campanas.
A los andamios que ya se ven en el Patio Chico, se suma la estructura de 40 metros que ya cubre toda la Portada del Nacimiento de la Catedral Nueva como trabajos previos al inicio de la segunda fase de ampliación del proyecto 'Ieronimus'. Los trabajos se centrarán en la bajocubierta de la nave central del complejo catedralicio. En paralelo a la «revolución tecnológica» que se ha proyectado para actualizar Ieronimus, se está desarrollando la restauración y puesta a punto, para la apertura al público, de la bajocubierta de la nave central del complejo catedralicio, la estancia que se encuentra entre la cara oculta de las bóvedas de crucería y el tejado.
El acceso a este espacio se sitúa justo en la terraza que se encuentra sobre la fachada del Nacimiento. Resulta imposible subir hasta ese punto por las estrechas escaleras de caracol con los materiales de obra necesarios para esa intervención. Por ello, se instala un andamio de más de 40 metros frente a esta fachada y que llega hasta una altura superior a la terraza para que las obras no interfieran en las visitas a la exposición.
La ampliación de Ieronimus recogida en el convenio entre el Ayuntamiento y el Cabildo cuenta con un presupuesto de 471.000 euros. Esta incluida dentro del Plan de Sostenibilidad Turística, por lo que tendrá financiación del Ayuntamiento, la Junta de Castilla y León y el Gobierno de España. De ese dinero, las tres administraciones públicas aportan 321.000 euros, mientras que el Cabildo contribuye con los 150.000 restantes. En 1974 se acometieron las obras de modificación de las cubiertas en la Catedral Nueva. Como se podrá ver en la bajocubierta, cuando se abra al público, se sustituyeron las antiguas estructuras de madera por otras nuevas de acero.
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