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Salamanca se ha vestido de solemnidad para dar la bienvenida a la Cuaresma con su primera procesión del Vía Crucis. Una tarde en la que las buenas temperaturas y el cielo despejado acompañaron a la celebración.
La de este año se vio marcada por la presencia de la imagen del Cristo de la Salud, la imagen que preside la iglesia de San Pablo y que la congregación de Jesús Rescatado ha sacado en procesión por las calles de la capital salmantina.
Esta celebración religiosa, cargada de simbolismo y devoción, atrajo a numerosos fieles que se congregaron para ser testigos de este evento marcado en el calendario litúrgico. Antes de la salida del Cristo del templo, a las 17:45 horas, decenas de salmantinos ya esperaban ansiosos a que la imagen saliera por las calles y pusiera rumbo a la Catedral.
Eran muchos los que deseaban ver al Cristo de la Salud a su paso por las calles de la capital del Tormes, ya que era la primera vez que esta imagen salía en procesión. Aunque la polémica también ha salpicado esta primera procesión de la Cuaresma, ya que un grupo de hermanos de la Congregación de Jesús Rescatado presentaron un recurso canónico contra la titularidad del Cristo de la Salud.
Tras su salida de la parroquia de San Pablo, la imagen recorrió la plaza de Colón, calle Jesús, Rúa Antigua, Serranos, plaza Fray Luis de León, Plata, Mazas, Latina, Tavira, plaza de Juan XXII y Catedral Vieja. Una vez en la basílica comenzó el rezo del vía crucis, presidido por el consiliario de las cofradías, José Luis Sánchez Moyano. Una vez terminado el acto, tomaron rumbo de vuelta al templo de origen.
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