El plan contra la doble fila se extenderá a todos los colegios

La Concejalía de Policía ampliará desde este verano la estrategia para minimizar el efecto de la segunda fila en los entornos de los centros escolares de la capital a las horas de entrada y salida de clase, después de que este curso haya acabado de forma satisfactoria el Plan de Puntos Rojos que se acometió en 14 colegios.

De aquí a que comience el próximo curso la Concejalía de Policía contactará con las direcciones de todos los centros para recordarles las zonas dónde no se pueden dejar los vehículos en doble fila porque, además de suponer una infracción, genera situaciones de peligro para los peatones, entre ellos los propios niños y familias que acuden a las aulas. Será una comunicación en doble sentido, ya que los centros también podrán informar a la Policía de sus propios «puntos rojos», mientras los agentes continuarán su labor para localizar nuevas zonas peligrosas.

La ampliación del Plan de Puntos Rojos a todos los centros de la capital llega después de haber trabajado con 14 colegios, centros en los que la Policía Local había detectado problemas de seguridad. Desde septiembre del año pasado se llevó a cabo un trabajo de contacto y concienciación de las familias contra esta práctica, especialmente en vías sensibles y de mayor tráfico.

Primero se contactó con las direcciones de los centros para que, a su vez, remitieran las recomendaciones a las familias. A la vez, los agentes han llevado a cabo una labor didáctica y de control para evitar que se aparque en zonas peligrosas pero sin sanciones masivas. Nueve meses después la eficacia de la estrategia invita a la Concejalía que dirige Ángel Molina a extender la medida a los centros de toda la ciudad. «No hemos conseguido erradicar todos los puntos rojos, pero sí se han minimizado las situaciones de peligro en todos», subraya el concejal.

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