Solo cuatro hospitales de Castilla yLeón ofrecen de manera gratuita el servicio de televisión -Salamanca no está entre ellos-, pero la Consejería de Sanidad no descarta llevar la gratuidad a otros complejos, a medida que vayan terminando los actuales contratos.
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Quienes tienen la mala suerte de sufrir un largo ingreso hospitalario suelen coincidir en una crítica: que haya que pagar por ver la televisión en la habitación, y que los precios sean bastante elevados. Una de las frases más recurrentes cuando los pacientes se quejan es aquella que dice que «hasta los presos en la cárcel tienen la tele gratis».
Hasta hace unos días tan solo había tres hospitales dentro de la red de Sacyl donde el servicio de televisión es gratuito: el Hospital Provincial de Ávila, el Complejo Asistencial Universitario de Burgos y el Hospital de Zamora. Este mes de julio se ha incorporado otro hospital más -el de Segovia- que ofrece de forma gratuita el servicio y lo argumenta como una forma de continuar su labor de humanización para el paciente.
En el resto de hospitales -por supuesto, el de Salamanca- hay que pagar y no precisamente poco.
La Consejería de Sanidad ha publicado recientemente cómo funciona el servicio de televisiones en cada hospital. En el caso de Salamanca, una hora de conexión se paga a 1,02 euros. En el caso de que se contrate un día entero, el precio es de 4,41 euros. La tarifa se va haciendo más económica -o menos abusiva- cuantos más días se paguen por adelantado: 12,71 euros por tres días, 24,59 euros por una semana y hasta 40,7 euros por 15 días.
Es caro, pero no el más caro. El servicio más costoso de Castilla y León es el del Río Hortega: a 2 euros la hora, 5 euros el día y 60 euros el mes.
Desde la Consejería de Sanidad se puntualiza que «cuando el servicio se presta en el marco de un contrato, puede llevar aparejados otros servicios adicionales como wifi, ocio o telefonía fija». Se refiere a que las pantallas asociadas a cada cama del hospital también ofrecen internet wifi, por si el paciente quiere conectar una table, por ejemplo. Por otra parte, el listado de canales no se limita a los convencionales de la TDT, sino que también se pueden visualizar aquellos en los que hay partidos de fútbol de pago.
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Otra de las diferencias entre la televisión de pago y la gratuita es que los hospitales donde no se cobra -como Zamora- tienen las televisiones acopladas a la pared, mientras que las pantallas del Hospital de Salamanca se mueven con un brazo retráctil que permite mover el televisor para acomodarlo a la vista del paciente o del acompañante.
Fuentes de Sacyl apuntan que no se descarta que en un futuro este servicio pase a ser gratuito en todos los hospitales. Se explica que, del mismo modo que cada hospital gestiona su factura energética, instala placas solares, etc, también decide si asume el gasto de la gestión de la televisión o lo deja en manos de un contrato privado.
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«Cuando terminen los actuales contratos con las empresas que se encargan de las televisiones en las habitaciones se valorará cómo proceder», indican desde la Consejería. Prueba de que está en mente es la reciente actuación en Segovia, donde el contrato era privado, pero cuando ha expirado la concesión se ha pasado a un servicio gratuito.
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