El 'caso Muface' se alarga y los pacientes denuncian más aplazamiento de cirugías

Los mutualistas de Muface empiezan a creer, por primera vez desde que comenzó la negociación, que la negociación entre el Gobierno y las aseguradoras va a llegar a buen puerto, aunque va a ser a costa de un cheque en blanco para garantizar que las aseguradoras no tengan pérdidas.

Este lunes terminaba el plazo para que las aseguradoras interesadas en participar en el concurso de Muface presentaran sus ofertas, pero el Gobierno ha decidido prolongar los tiempos para incluir una serie de cláusulas en el concurso que colmen las exigencias de las aseguradoras.

El ministro Óscar López mantuvo el pasado viernes una reunión con los representantes de Adeslas -la primera aseguradora que dijo que se bajaba del barco- para convencerles de que sigan en Muface. ¿Las condiciones? Una mejora del contrato de un 33,5% respecto al último vigente y una cláusula por la que el Estado se haga cargo de las posibles pérdidas.

Desde el sindicato CSIF se muestra atónitos por el devenir de las conversaciones. «Dijimos que si la segunda licitación fracasaba y había que acudir a una tercera convocaríamos una huelga, pero parece que el Gobierno ha querido cortar la huelga diciendo que va a modificar las condiciones de la licitación, pero que sigue siendo la misma», apunta Federico Martín desde CSIF Salamanca.

Los mutualistas, que confiaban en que este lunes quedara aclarado el futuro de su asistencia sanitaria, piden que el conflicto se resuelva lo antes posible para dejar de sufrir «situaciones muy desagradables». «No paramos de recibir quejas de mutualistas salmantinos a los que se les están retrasando tratamientos o pruebas. El último caso que nos han venido a notificar es el de una mujer, paciente de Adeslas, a la que su médico le ha detectado nódulos en la garganta y le ha dicho que, efectivamente, tiene que operarse, pero que tendrá que esperar hasta que se aclare quién va cubrir esos gastos. La paciente no quiere esperar porque por la salud no se espera, pero esto es a lo que nos ha llevado esta situación», lamenta Federico Martín.

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