El lugar favorito de los salmantinos para tomar el sol

Durante los días de verano, no hay nada como un espacio al aire libre para relajarse y pasar un día diferente en contacto con la naturaleza. Y, si es cerca de un río o en una playa, mejor. Por ello, las cercanías al río Tormes son de los lugares favoritos entre los salmantinos para disfrutar de los días soleados.

En el Parque de la Aldehuela, la zona de la orilla del Tormes cerca de las piscinas municipales, justo entre los chiringuitos, se ha convertido en uno de los lugares para tomar el sol. Algunos incluso optan por darse un chapuzón, aunque el baño en la zona no esté permitido debido a que la calidad del agua no es la adecuada, lo que podría implicar riesgos para la salud de los usuarios.

A pesar de ello, jóvenes, mayores y familias acuden al lugar para caminar y sentarse a tomar el sol; un emplazamiento que las personas eligen debido a su tranquilidad, ya que, pese a que la zona es conocida y cuenta con sus visitantes habituales, no suele saturarse.

«Siempre que tengo la oportunidad aprovecho para venir. Se está muy bien aquí. Es muy tranquilo. A mí, que me gusta mucho el contacto con la naturaleza, me parece un buen sitio para venir con la perra y desestresarme», explica Lorena Amores, una mujer que visita de manera frecuente el lugar.

Como Lorena, son muchos los salmantinos que repiten año tras año sus paseos por este espacio escondido en la Aldehuela, pero pocos tan constantes como Pepe Martín y Emilia Hernández. La pareja acude diariamente desde que empiezan las temperaturas propias del verano hasta que el frío da por finalizada la temporada de las actividades al aire libre. Y, aunque el horario en el que van al lugar varia de un día a otro, son pocas las ocasiones que no visitan la zona.

«Hay veces en las que me paso aquí casi todo el día. Sin ir más lejos, ayer estuve desde la una de la tarde y no me fui a casa hasta como las ocho», comenta sonriente Pepe Martín, que tiene asistiendo a la zona desde hace alrededor de 50 años.

Su compañera, Emilia Hernández, se sumó a la tradición de tomar el sol en la Aldehuela hace cinco años. Sin embargo, afirma que, desde entonces, no falta ni un verano. «Nos gusta venir porque es una zona tranquila. Además, hay bastante árboles que dan sombra y uno se puede sentar debajo de ellos cuando tiene calor. Yo, por ejemplo, los primeros días si me pongo al sol, pero, ya después de que agarro un poco de color, me quedo a la sombra», comenta la mujer, a la vez que insiste en que hacen falta algunas mejoras en el área.

«Cuando yo era pequeña, esto estaba perfecto. Lo limpiaban todo el tiempo. Ahora lo tienen un poco abandonado. Hace unas semanas, cortaron la hierba y está bien, pero antes estaba altísima. Es una pena», critica Emilia Hernández.

A las personas que repiten año tras año su visita, se le suman los primerizos. Ese es el caso de Isabel Barrios, que descubrió el lugar este verano, debido a que adoptó una mascota y estaba buscando espacios para sacarla a pasear. «Es bastante cómodo y tranquilo. Es posible que repita otros años», señala.

Además de su cómoda ubicación, otro de los beneficios que impulsa a los salmantinos a reunir en este espacio son los chiringuitos. Estos permiten a las personas tomar o comer algo siempre que les apetezca. Un servicio muy valorado entre los usuarios.