Los problemas y desperfectos de esta sede salmantina desde su entrada

Seis décadas han pasado desde que se construyera el Palacio de Justicia de Salamanca y, a diferencia de otros inmuebles, los retoques para adaptarse a las nuevas realidades han sido mínimas durante este tiempo. Por eso las quejas por las numerosas deficiencias del inmueble se han convertido en una de las principales observaciones que realizan los presidentes de la Audiencia Provincial al Ministerio en su memoria anual.

“No reúne las condiciones de accesibilidad legalmente previstas, cuestión esta en la que se viene insistiendo reiteradamente con nulo resultado con la excusa de la inminente reforma del edificio y las necesidades técnicas”, trasladó el presidente de la Audiencia, José Antonio Vega, en su último informe. Una crítica que se comprueba nada más entrar al inmueble, donde hay una empinada escalera, sin alternativas para que una persona con dificultades de movilidad pueda acceder por si misma. Lo habitual es acudir a los servicios sociales como a Cruz Roja cada vez que tiene que intervenir una persona de estas características. Incluso se han dado ocasiones en las que se ha trasladado un juicio al edificio de la plaza Colón porque tanto el acusado como la víctima presentaban problemas de movilidad.

No hay un espacio adecuado tampoco para un archivo judicial en el inmueble, pese a su enorme tamaño. También surgen problemas con enjuiciados, víctimas y testigos que coinciden antes de un juicio de menores debido a la inexistencia de una sala propia. Dificultades a las que se añaden las averías constantes del arco de seguridad que hay a la entrada.

La reforma es la esperanza para acabar con la mayoría de las deficiencias. Además, la rehabilitación implicará un cambio en la ubicación de los juzgados. Las indicaciones del Ministerio de Justicia a las empresas para redactar el proyecto especificaban que el reformado Palacio de Justicia acogerá, además de la Audiencia Provincial, a los dos órganos dedicados al ámbito Contencioso Administrativo y los otros dos que se encargan de la jurisdicción de Social, juzgados que en la actualidad se encuentran en Colón. A cambio, el de Vigilancia Penitenciaria y el Juzgado y la Fiscalía de Menores, que ahora están en el Palacio, se trasladarán al otro inmueble judicial de la ciudad. Sobre el futuro Primera Instancia número 10, que se dedicará a Familia, se desconoce dónde estará tras la reforma ya que su creación no estaba prevista entonces.

La rehabilitación, además de las propias dependencias de la sección única de la Audiencia Provincial y los espacios para juzgados, también incluye la creación de cuatro salas de vistas, una de ellas más amplia para poder ubicar al jurado popular, así como nuevas dependencias para testigos y detenidos y una sala para Fiscalía.

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