Los espectaculares datos de visitantes que ha dejado la Semana Santa salmantina

Por cada visitante que subió a las torres de la Catedral (Ieronimus) entre el Viernes de Dolores y el Domingo de Resurrección de 2021, este año lo hicieron cinco. La proporción fue muy similar en Scala Coeli, que permite ascender a los balcones más elevados de La Clerecía. El aumento llegó incluso a ser superior en la Casa Lis.

Son ejemplos de los resultados de una Semana Santa que el concejal de Turismo, Fernando Castaño, tildó esta semana de “espectacular”. “Había tirón y ganas de venir a Salamanca. Si hubiéramos tenido el doble de plazas hoteleras, seguramente las habríamos llenado igual”, señaló en referencia a la ocupación hotelera, que desde el Observatorio Turístico se estima en una media del 83%, eso sí con muchos alojamientos al completo.

Entre el 8 y el 17 de abril, la Oficina de Información Turística de la Plaza Mayor atendió 11.628 consultas. Son muchas menos que antes de la pandemia —44.355 y 40.756, en 2017 y 2018, respectivamente—. Sin embargo, esa caída de un 75% no cuadra con los datos registrados en los hoteles, la afluencia en las calles y las visitas a monumentos y espacios museísticos. La pandemia sí parece haber hecho mella en este servicio, al que ya antes de la covid cada vez acudían menos viajeros al poder obtener la mayor parte de la información que necesitan en internet a través de sus dispositivos móviles.

En las dependencias de la Plaza Mayor entraron este año la mitad de viajeros que en 2019, pero es que ese año recordado como uno de los mejores de la historia desde la perspectiva turística ya se registró un descenso del 42,72% respecto al ejercicio anterior. Sin embargo, de la estadística de consultas sí se desprende que cuatro de cada cinco visitantes que han llegado a Salamanca esta Semana Santa eran turistas nacionales.

Como ya avanzó este periódico tras el fin de semana de Ramos, se percibe además un incremento de las estancias de los viajeros impulsada por la promoción del 2x1. Si en esos tres primeros días rozaba casi los tres días, en el computo global se queda en 2,55. Desciende, pero aún así implica que una reducción a un tercio de los excursionistas de un día, y que los turistas han pasado de media más tiempo en la ciudad que en 2018, 2019 o 2021 —en 2020 coincidió el confinamiento—.

Además de en los alojamientos turísticos, los espacios monumentales han sido los que más han notado el aumento en la afluencia de turistas. Ieronimus recibió en diez días 7.359 visitas frente a las 1.520 de 2021, cuando España vivía la cuarta ola, se mantenían restricciones y se cancelaron todas las procesiones. Ciertamente han sido casi un 20% menos entradas que en 2019, un año récord para el sector turístico de Salamanca, pero no dista mucho de las 7.520 personas que subieron a la parte alta de la Catedral en la Semana Santa de 2018.

Por su parte, la exposición Scala Coeli ha llegado este año incluso a mejorar los datos de la última Pasión de la prepandemia, y en los Museos de Historia de Automoción y de Arte Nouveau y Art Déco la diferencia es mínima con 2019. Así, Castaño se refirió a un “futuro prometedor” para el sector turístíco pese a los “nubarrones” por la situación internacional.

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