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Visitantes observando los símbolos inscritos en el techo del convento. LAYA
El legado oculto de Las Claras

El legado oculto de Las Claras

La techumbre del convento alberga gran variedad de símbolos en los que se relata la historia de la reina Berenguela de León y Castilla y en el que la chova piquirroja juega un papel esencial

Jueves, 7 de diciembre 2023, 07:46

Símbolos, reyes y un animal, la chova piquirroja, son los protagonistas de algunas de las interpretaciones que se hacen del particular techo del convento de Las Claras, un lugar desconocido para muchos salmantinos pero que abre sus puertas con el programa de 'Las llaves de la ciudad' para que su historia no se quede entre las paredes del templo.

Los comienzos de esta emblemático espacio se remontan al siglo XIII, en plena época medieval. Una pequeña comunidad de mujeres comenzó a vivir en este espacio hasta que el Papa las consagró bajo la orden de Santa Clara de Asís, creando así un lugar abierto al culto en la ciudad. Desde entonces, Las Claras y sus comunidades religiosas han visto la evolución de la ciudad desde las rejas de la clausura.

La importancia del techo de este Museo ha llegado a la actualidad cuando el biólogo salmantino Raúl Tapia, descubrió la figura de una curiosa ave de plumaje negro y pico rojo en el 'desván' del templo. Se trata de una chova piquirroja. A partir de este descubrimiento, dos aficionados a la historia, Charo García de Arriba y Miguel Ángel Martín Mas, investigaron sobre los orígenes de este techo de estilo mudéjar lleno de símbolos y escudos. Según su interpretación, todo apunta a que los símbolos del artesonado cuentan la historia de una figura desconocida para muchos salmantinos, nieta de Aquitania, madre de Fernando III y señora de Salamanca. Se trata de la reina Berenguela de León y de Castilla, una gran promotora del arte y de la cultura en su tiempo.

La historia que relaciona a esta reina parte con de la chova piquirroja, cuyo símbolo la relaciona directamente a Berenguela. Partiendo de una historia que recorre a personajes tan importantes de la historia como son Tomás Becket, pasando por el rey Alfonso octavo de Castilla, Leonor de Aquitania o Enrique II de Inglaterra se recorre toda la historia a través de la simbología que desemboca en la reina Berenguela.

Todo apunta a que la propia reina llegó a Salamanca al final de su vida para dejar reflejada su historia y reivindicar su puesto como reina de León y, sobre todo, esposa del que, a día de hoy tiene un medallón en la Plaza Mayor por haber fundado la Universidad y madre de Fernando III 'El Santo', conquistador de Córdoba y Sevilla. Con esta heráldica, se representan la lucha por la sucesión del Reino de León, la muerte de su esposo, el ascenso de su hijo al trono leonés en el año 1230; la muerte de las dos esposas que tuvo el mismo, Beatriz de Suabia -fallecida en 1235- y Juana de Pnthieu; un emotivo homenaje a su abuela, a la que la propia Berenguela le ofrendó el fruto de la Concordia de Benavente y un tributo a los orígenes maternos y al Imperio Angevino de la familia Plantagenet-Aquitania.

La reina Berenguela falleció en noviembre de 1246 y, según la interpretación realizada por Charo García de Arriba y Miguel Ángel Martín Mas, los hechos que narran los emblemas de la techumbre abarcan, desde 1204, un año importante para la reina ya que es cuando fallece su hermana Mafalda y cuando se anula matrimonio con Alfonso noveno de León, hasta, aproximadamente, el mismo año de su muerte.

Una chova piquirroja, que representa a los padres de Berenguela, un escudo con castillos y leones o una flor de lis, son algunas de las figuras en las que se pueden ver reflejadas varias de las figuras de estos emblemáticos personajes.

A pesar de que estas explicaciones solo pertenecen a unas interpretaciones que aún no se han probado como ciertas, este museo es toda una joya en la que las maderas y lienzos del techo narran una historia a través de heráldica.

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