Las medidas de los hosteleros para salvar sus negocios: incentivos fiscales y eliminar calles peatonales

“Que las medidas restrictivas vayan acompañadas por ayudas que compensen las pérdidas”. Así se manifestaba ayer el presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería, Álvaro Juanes. En este sentido, reconoce que su sector necesita una serie de medidas que permitan paliar la grave crisis que arrastran desde el mes de marzo. “Necesitamos, en primer lugar, un alivio fiscal y bonificaciones, tanto a nivel local, como regional y nacional; IBIs, tasas, pero también un IVA superreducido”, explica. De igual forma, los hosteleros reclaman más ayudas en materia de financiación. “Necesitamos más líneas de financiación, flexibilización de las líneas de crédito, demoras en los pagos, y por supuesto ayudas directas para que podamos lograr la supervivencia de nuestros negocios”, añade Juanes.

El sector del comercio tiene claras sus reivindicaciones, que pasan por medidas concisas para tratar de incentivar el consumo en los establecimientos de proximidad. Esto pasa, según Antonio Flórez, secretario general de Aesco, por acciones como recuperar el tráfico rodado en algunas de las vías peatonales del centro de la ciudad. “No se trata de deshacer todo de la noche a la mañana, pero sí permitir cierta flexibilidad”, reconoce. Una de las acciones más inmediatas pasarían por “recuperar el paso de los autobuses por las paradas ubicadas junto a la Plaza Mayor. Hay muchas personas que acuden al Mercado Central a comprar y el bus urbano les da la vida, porque buena parte son mayores y tener que desplazarse a la Gran Vía con bolsas supone un esfuerzo grande”, explica el responsable de Aesco. En esta misma línea transcurre otra propuesta para el Ayuntamiento de Salamanca, como habilitar plazas de aparcamiento en vías cercanas a calles peatonales como Sol Oriente, Palominos o Rector Lucena, entre otras.

Parking. La otra importante medida que ‘sueñan’ los comerciantes es una vieja aspiración planteada hace unos años y que pasa por evaluar la posibilidad de construir un parking subterráneo en Obispo Jarrín, en las inmediaciones del Mercado Central. Esta idea contemplaría un intercambiador en la primera planta para el bus urbano y para la carga y descarga, y dos o tres plantas para el aparcamiento de vehículos. Flórez reconoce que se trata de una alternativa complicada, pero que aliviaría mucho la llegada de clientes al centro de la ciudad.

Por último, desde Aesco se va a solicitar una posible compensación a los comercios que tengan en sus accesos andamios de obras por rehabilitación de fachadas.

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