Las escuelas rurales se podrán mantener con solo tres alumnos

El preacuerdo entre la Junta y cuatro de los cinco sindicatos presentes en la mesa sectorial de Educación va más allá de la reducción de la ratio de alumnos y de las horas lectivas que debe impartir cada docente, acuerdos que se conocieron hace una semana. El pacto también establece una serie de mejoras que benefician especialmente a los centros ubicados en el medio rural, así como a los alumnos con necesidades educativas, y que se pondrán en marcha a partir del próximo curso.

Entre los avances destaca especialmente que la Junta mantendrá abiertas las escuelas de las localidades que tengan solo tres alumnos. Hasta ahora el mínimo fijado para no cerrar un aula rural era que hubiera cuatro escolares, aunque en los últimos años se había permitido la continuidad de aquellas en las solo había tres, siempre y cuando en el pueblo hubiera niños con menos de tres años y cuyos padres se comprometieran por escrito a matricularlos en la escuela del municipio cuando tuvieran la edad para iniciar 1º de Infantil. A partir del próximo curso, tal requisito ya no será necesario, por lo que todos los municipios que dispongan de tres alumnos tendrán la seguridad de que el colegio seguirá abierto.

El mantenimiento de aulas abiertas con tan pocos escolares por el que apuesta Castilla y León es una ‘rara avis’, tanto en España como en Europa. Una medida adoptada casi por obligación para no quitar más servicios a las pequeñas localidades ante la grave crisis demográfica por la que atraviesa buena parte de la Comunidad, entre ellas casi toda la provincia salmantina. No obstante, la iniciativa también redunda positivamente en los resultados académicos. Los expertos señalan que uno de los motivos por los que el sistema educativo de Castilla y León es el mejor de España en informes internacionales como PISA y TIMSS es el bajo número de alumnos por docente que hay en el medio rural, lo que facilita una atención más personalizada.

No se trata del único cambio que beneficia al medio rural. El acuerdo entre la Consejería de Educación, CSIF, ANPE, STECYL y CCOO también contempla que el máximo de alumnos por maestro en centros rurales agrupados pase de 11 a 10. Es decir, si hay 11 alumnos, ya sería necesario contratar a un segundo docente. La Junta, además, se compromete también a limitar la mezcla de estudiantes de diferentes cursos en una misma aula. Ahora pueden formar parte de una sola clase niños de cuatro cursos diferentes, algo habitual cuando el centro dispone de muy pocos escolares. El compromiso de la administración es que procurará que no haya más de tres cursos.

Las mejoras también se extienden al alumnado con necesidades educativas. Los maestros de la especialidad de Pedagogía Terapéutica atenderán a un máximo de ocho niños, en lugar de los diez de ahora. En el caso de los de Audición y Lenguaje, el máximo pasa de 20 a 15. Y el personal dedicado a apoyo de compensatoria atenderá a un máximo de 21 alumnos en centros urbanos y 18 en el medio rural, cuando hasta ahora eran 23 y 20 respectivamente. Estas medidas implicarán que la dotación de estos especialistas en la provincia aumente.

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