Las casas inhabitables: solo 12 de 353 inmuebles de la Sareb podrían ampliar el alquiler social en Salamanca

De todos los inmuebles de Salamanca que engrosan el patrimonio del “banco malo” —una cifra que ascendería a 353, según informa la web de este organismo—, solo una docena de ellos, incluso necesitando reformas previas, serían a día de hoy habitables. Es el resultado del cribado que ha realizado la Dirección General de Vivienda de la Junta de Castilla y León de cara a la posible compra de alguna de ellas para sumarlas al parque de vivienda pública de la Comunidad.

Según explicó ayer a este periódico María Pardo, que se encuentra al frente de este departamento de la administración autonómica, solo ese 3,4% de los inmuebles de carácter residencial que anuncia la Sareb en Salamanca “estarían en un estado de posible adquisición”.

Hace menos de tres meses, eso sí, mucho antes de que Pedro Sánchez anunciase el pasado sábado las 50.000 viviendas sociales y de que se matizasen las cifras tras el Consejo de Ministros del martes, la Junta de Castilla y León solicitó a la Sareb un listado de las viviendas disponibles en Castilla y León. Frente a las 2.794 casas que, en su web, el “banco malo” asegura tener en la Comunidad, la información facilitada solo incluía 2.476 inmuebles. Sin embargo, en ese listado se habían “colado” 1.906 garajes y trasteros, que lógicamente no son aptos para convertirse en viviendas de uso social. Tras el análisis técnico de las 888 inmuebles que quedaban, la Consejería de Vivienda, a cuyo frente se encuentra Juan Carlos Suárez-Quiñones, que en toda la Región solo 93 estaban en condiciones de ser adquiridas para ofrecerlas como alquiler social. Y exactamente lo mismo ha ocurrido en lo que respecta a Salamanca.

Frente a las 353 viviendas que la Sareb asegura tener en esta provincia, solo facilitó a la Junta información de 210 inmuebles, de los que solo 98 eran realmente casas —otros 112 eran garajes, locales y trasteros—. “Y de esas, decentes nos quedan solo doce”, aseguró a este periódico la directora general de Vivienda. “Serían las únicas que entendemos que son susceptibles de estudio de cara a su posible adquisición por parte de la Junta”, añadió apuntando el mal estado y la necesidad de reformas que requieren el resto. No obstante, en la mayoría de esa docena de inmuebles que se salvaría de la criba también serían necesarias, a juicio de los técnicos de la Junta, intervenciones previas a ofrecerlas como hogares de alquiler social.

Como ya informó LA GACETA, una gran parte de los inmuebles de la Sareb, que en su momento compró a los bancos para dotarlos de activo y ayudarles a sanear sus cuentas, se encuentran a medio acabar, muy deteriorados, vandalizados e incluso okupados al haber permanecido durante tantos años vacíos, o en zonas alejadas o conflictivas socialmente.