Las ayudas autonómicas al alquiler rebajan los requisitos de solicitud

La Junta de Castilla y León ha presentado el proyecto por el cual se establecen las bases reguladoras para la concesión de subvenciones destinadas al alquiler y a la mejora de la accesibilidad de viviendas. A través del mismo se puede observar una relajación en los requisitos de solicitud y la nueva posibilidad de acceso en caso de optar por el alquiler de habitación individual.

Mientras que los requisitos personales para acceder continúan siendo los mismos en relación a cantidad de ingresos de las personas que tienen su domicilio habitual en la vivienda, el precio de renta máxima mensual que se plantea se incrementa hasta los 550 euros. Esta cuantía supone un aumento de 50 euros respecto a la renta establecida como máxima en años anteriores.

El presidente del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria, Valentín Rodríguez, valora esta medida autonómica como “positiva” aunque considera que mantiene la situación “igual que antes y el efecto es un poco engañoso”.

Según explica, “está bien la subida, pero se habrá hecho en base a la subida del 10 por ciento del IPC, lo que también hace aumentar el precio de los alquileres por incremento de precio de la comunidad, por ejemplo. Si el IPC estuviera al 0 por ciento y suben la renta máxima 50 euros sí se notaría”.

Además, reconoce que en el 95 por ciento de los casos, las familias se decantan a la hora de alquilar por el precio que podrían pagar sin tener en cuenta la ayuda, ya que “si la Junta recibe 100.000 solicitudes y luego solo puede pagar 5.000, tienes que saber cómo afrontar el alquiler”.

Por su parte, Cáritas considera la modificación de las bases “insignificante” ya que “no supone que cambien muchos las cosas”. En este sentido, indican que puede ser “casi una oportunidad para que haya un cambio más sustancial”.

A la modificación en el requisito del precio, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio añade la novedad de poder solicitar la ayuda en caso de que se opte por el alquiler de habitación en vez de vivienda entera.

En este caso, el precio no puede superar el precio de arrendamiento de 200 euros mensuales. Tal y como explica Valentín Rodríguez, “esta medida está destinada a personas no solo con inestabilidad económica, sino de vivienda” ya que “nadie perdura viviendo en una habitación toda su vida. Es solo una medida que podría ayudar a emanciparse especialmente a gente joven”.

En cualquier caso, esta subvención cubriría la cuantía correspondiente al 40 por ciento del precio de la renta mensual siempre que se cumplan todos los requisitos. Ampliable, además, al 50 por ciento en el caso de beneficiarios que tengan más de 65 o menos de 35 años.

La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio ha firmado con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana el convenio para la puesta en marcha del Plan Estatal para el acceso a la vivienda, entre las que se encuentra esta subvención. Para la misma se cuenta con una dotación presupuestaria de más de 70 millones de euros para el periodo comprendido entre el año 2022 al 2025.

Según el proyecto de las bases de la subvención, el precio de alquiler máximo que el arrendador pague por la vivienda debe ser de 550 euros, aunque esta cantidad también variará en relación al tipo de familia y vivienda a la que se acceda. Igualmente se deberán cumplir una serie de requisitos. En el caso de la solicitud de ayuda por habitación, el pago deberá tener un máximo de 200 euros.

La última ayuda para el alquiler de la Junta benefició a 2.391 inquilinos de Salamanca, 772 de ellos eran menores de 35 años, 530 mujeres y 242 hombres. En toda Castilla y León consiguieron la ayuda más de 15.000 beneficiarios. En cuanto a la cuantía, la suma ascendió a 4,6 millones de euros, de los cuales uno de cada seis fueron para los salmantinos.

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