La subida de la gasolina se ‘come’ la bonificación del Gobierno

Sin freno y sin pausa, el precio de la gasolina continúa elevándose al mismo ritmo que crece la preocupación de los conductores. El repunte de precios que comenzó a mediados de abril y que se ha intensificado en la última quincena de mayo ha supuesto que los salmantinos ya paguen más por este combustible que antes del 1 de abril, pese a que ahora se aplica un descuento de 20 céntimos por litro que hasta entonces no existía.

La inquietud de los propietarios de vehículos que utilizan gasolina resulta lógica a la vista de la tendencia de los precios. Las propias gasolineras reconocen que los mercados internacionales están muy “volátiles”, por lo que resulta difícil prever el comportamiento del combustible. De momento, la escalada de precios continúa y no se le ve techo. El precio medio de estaciones de servicio de Salamanca está ya en 2,02 euros por litro, según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica, cota jamás alcanzada por este combustible en la historia. De hecho, ya hay 37 de las 101 establecimientos que lo ofrecen a más de 2,05.

La evolución alcista en el último mes y medio resulta evidente. El 1 de abril, cuando comenzó a aplicarse el descuento, la gasolina 95 tenía un coste de 1,81 euros por litro. En los siguientes días experimentó una ligera caída, hasta 1,79 euros el 11 de abril. Desde entonces, las subidas han sido constantes e incluso se han acelerado en las dos últimas semanas, hasta alcanzar esos históricos 2,02 euros de media. Con estos precios, y una vez aplicada la bonificación de 20 céntimos, el conductor paga 1,82 euros, un céntimo más que antes del 1 de abril, cuando no había descuento alguno.

Las cotizaciones del petróleo están empujando a la gasolina, aunque no sea el único elemento que se toma como referencia para fijar los precios. A mediados de mayo se encontraba en el entorno de los 100 dólares por barril, mientras que ayer cerró a 116. Subidas que se reflejan en los surtidores de este combustible. El aumento afecta de manera directa a los más de 98.000 propietarios de vehículos en Salamanca que emplean gasolina. La mayoría de ellos son turismos, más de 67.000. Le siguen las motocicletas con 18.600 y los ciclomotores con 8.200. 2.400 son furgonetas y el resto otro tipo de vehículos.

El impacto en los bolsillos de los conductores es enorme. En comparación con hace un año, el incremento es desorbitado. En mayo de 2021 llenar el depósito de un vehículo con una capacidad de 50 litros costaba 68,5 euros. Ahora, en cambio, se ha disparado hasta los 91 una vez aplicado el descuento de 20 céntimos por litro —101 euros sin él—, un incremento del 32,8%.

A diferencia de lo que está ocurriendo con la gasolina, que acumula subida tras subida en las dos últimas semanas, el gasóleo ha mostrado una evolución ligeramente a la baja. Si en abril y la primera mitad de mayo se desbocó, con precios superiores a los de la gasolina, ahora ha entrado en una senda de estabilidad, aunque las gasolineras indican que es difícil prever lo que puede ocurrir en las próximas semanas. A principios de mayo alcanzó 1,96 euros por litro en Salamanca, pero ahora se encuentra en 1,90. Es cierto que está más caro que cuando entró en vigor el descuento, pero la bonificación todavía surte efecto para los conductores, a diferencia de lo que ocurre con la gasolina.

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