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Miércoles, 23 de septiembre 2020, 23:02
La curva, en este caso descendente, de la evolución de la población en Salamanca en las últimas décadas está lejos de aplanarse en los próximos años según el Instituto Nacional de Estadística (INE). La provincia llegará a 2035 con menos de 300.000 habitantes, algo que no ocurría desde finales del siglo XIX. El desfase entre nacimientos y defunciones y la marcha de los jóvenes seguirá siendo una constante en los próximos 15 años, que solo amortiguará la llegada de extranjeros.
El informe del INE parte de la población que Salamanca tiene en 2020 y que asciende a 331.048. Los cálculos del organismo apuntan a que cada año la provincia perderá alrededor de 2.000 habitantes, por lo que en 2033 ya se situará por debajo de los 300.000 residentes y en 2035, último año del estudio, se quedará en solo 294.829. Si se cumplen las previsiones del INE, Salamanca retrocedería a la segunda mitad del siglo XIX. Hay que remontarse hasta el censo de 1877 para encontrar una cifra oficial de habitantes más baja que en la actualidad. En el siguiente censo, el de 1887, la provincia ya superaba los 300.000 residentes.
Las razones para un desplome de tal calado, 36.000 habitantes en solo 15 años, seguirán siendo las mismas que ahora. Habrá entre 4.000 y 4.100 defunciones por año, mientras que los nacimientos se moverán entre los 1.800 al principio para acabar en 1.600 en 2035. Un desajuste provocado por la marcha de salmantinos, principalmente jóvenes, que va a continuar próximamente, con la salida de entre 4.400 y 4.900 anualmente. Solo el incremento de la llegada de extranjeros a la provincia paliará la pérdida de población, ya que la llegada de inmigrantes pasará de 1.000 a 2.000 personas al año según el estudio del INE. De hecho, los extranjeros superarán los 30.000 habitantes en Salamanca en 2035, más del 10% del total de residentes.
A la vista de los resultados, la despoblación seguirá marcando a la provincia salmantina, cuyo declive comenzó en la década de los 60. Entonces vivían en Salamanca más de 400.000 personas. La marcha a otras provincias y al extranjero en busca de trabajo fue reduciendo el número de residentes, a excepción de a principios de siglo XXI, cuando un pequeño repunte situó la población en 351.000. Sin embargo, la crisis económica de 2008 ha devuelto a Salamanca a cifras negativas.
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