La Salamanca en blanco y negro, al alcance de todos en internet

Recordar el pasado ahora resulta más fácil. Gracias a las nuevas tecnologías, cualquier salmantino podrá conocer cómo era su ciudad o algunos de los pueblos más pintorescos de la provincia sin moverse de casa.

Con varios clic en el ordenador o en el dispositivo móvil podrá ver por primera vez en abierto las fotografías que desde 1860 conserva el Instituto de Patrimonio Cultural de España (IPCE) de Salamanca y de otros muchos puntos de España. El Ministerio de Cultura ha puesto a disposición del público, en línea y en abierto, más de 275.000 imágenes de la institución, un conjunto documental de extraordinario valor y que muestra los numerosos cambios que ha experimentado la ciudad, así como municipios como Béjar, Miranda del Castañar, Candelario, La Alberca o Ciudad Rodrigo.

De las 27 colecciones que componen la fototeca online, destaca el archivo Ruiz Vernacci, que conserva más de 12.000 negativos originales de uno de los pioneros de la fotografía en España, Jean Laurent (1816-1886), y entre las que se encuentran las imágenes más antiguas de Salamanca, principalmente de sus monumentos. Además, el IPCE publica por primera vez más de 7.000 fotografías de dos de sus fondos más valiosos, los archivos Pando y Wunderlich.

Este último es de vital importancia para recoger la Salamanca del primer tercio del siglo XX. Es la obra del fotógrafo Otto Wunderlich (Stuttgart, 1887- Madrid, 1975), que se trasladó a España en 1914, país en el que desarrolla una producción fotográfica en la que, junto a proyectos de encargo para instituciones culturales y empresas del sector industrial, destaca la fotografía de paisajes, escenas tradicionales y tipos populares. Durante sus viajes a la provincia, realizados entre los años 20 y principios del 30, antes del inicio de la Guerra Civil, es el encargado de inmortalizar la realidad salmantina, así como sus monumentos más importantes.

El catálogo online del Instituto de Patrimonio Cultural de España también permite conocer el pasado más reciente. Principalmente gracias al trabajo de Juan Miguel Pando Barrero (1915-1992) y su hijo, Juan Pando Despierto, que ofrecen una visión más moderna de Salamanca, con fotografías que comienzan en los años 50 y que llegan hasta casi comienzos del siglo XXI.

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