La rotonda de Buenos Aires seguirá siendo el único punto de enlace de la A-62 con la A-66

La glorieta de Buenos Aires seguirá siendo el único punto para enlazar la A-62 con la A-66 durante mucho tiempo. Así se desprende de las respuestas del Gobierno a las preguntas sobre el estado del proyecto para realizar una conexión directa entre ambas autovías que evite la peligrosa rotonda. Desde hace meses, la postura del Ministerio de Transportes es que el nuevo proyecto se encuentra en redacción, sin avanzar ninguna información más. Un silencio al que se suma una inversión cuando menos llamativa para ejecutar una obra que está presupuestada en más de 24 millones de euros y que no tiene una fecha para su supuesta conclusión.

La falta de datos sobre el proyecto resulta curiosa. Las preguntas presentadas por parlamentarios del PP y Ciudadanos en los últimos meses han recibido prácticamente la misma respuesta, que el proyecto está en redacción. Dicha fase comenzó hace año y medio, según la información del propio Ministerio de Transportes, y poco se sabe de él. En su momento habló de una mejora local de la conexión con ramales más directos, pero desde hace más de un año el Gobierno no desgrana en qué va a consistir el nuevo proyecto, lo que ha alimentado las dudas.

Hay que recordar que en mayo de 2017 el anterior Ejecutivo de Rajoy adjudicó el trabajo para la redacción del nuevo enlace a la empresa Ginpronsa Ingeniería por un importe de 534.0000 euros y con un plazo de ejecución de dos años. Sin embargo, la iniciativa tuvo que ser paralizada en abril de 2019 al no superar los trámites medioambientales, pese a que se habían presentado dos alternativas de trazado. El Ministerio para la Transición Ecológica rechazó construir un nuevo tramo de autovía en la zona de La Salud tanto por “los efectos adversos significativos sobre el medio ambiente”, como por la presencia de la estación de arte rupestre que se extiende a lo largo de cientos de metros y que, como Bien de Interés Cultural, dota de protección a todo su entorno.

El rechazo en la tramitación ambiental ocurrió hace dos años y medio, sin que por ahora se sepa cuál es la alternativa que ha buscado el Gobierno de Pedro Sánchez. El Ejecutivo, eso sí, afirma que el proyecto que está redactando va a ser plenamente compatible con la resolución del director general de Biodiversidad y Calidad Ambiental de abril de 2019.

Los Presupuestos del Estado de 2022 tampoco aclaran las dudas existentes sobre el futuro trazado del enlace. De hecho, generan aún más interrogantes. Para empezar, cifra en 24,3 millones de euros el coste total del proyecto. Una inversión que tiene una distribución plurianual cuando menos curiosa. En 2021, por ejemplo, consigna que ya se han ejecutado 100.000 euros, mientras que para 2022 reserva dos millones de euros. En 2023 habilita tres millones y diez en 2024. Pese a que entre el periodo 2021-2024 solo suman 15,1 millones, en 2025 no fija inversión alguna para el enlace entre la A-62 y A-66, cuando en teoría quedarían por ejecutar más de 9 millones de los 24,3 en los que está presupuestado el proyecto.

El retraso supone un problema para la seguridad vial en la circunvalación suroeste de la capital salmantina. Al tenerse que desviar el tráfico de la A-66 por la rotonda de Buenos Aires, la glorieta es uno de los puntos de la ciudad que soporta más tráfico, más de 20.000 vehículos al día según los últimos datos. Además, muchos de ellos son vehículos pesados, los más proclives a sufrir accidentes. En más de una ocasión se han registrado vuelcos debido a los pronunciados giros que han de realizar.

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