La Policía Local será “implacable” para evitar que haya botellones en Salamanca

El final del estado de alarma puso de manifiesto las ganas de una parte de la juventud en celebrar con cierta libertad una noche sin toque de queda. Las imágenes de aglomeraciones en la Plaza Mayor, sin espacio y en muchos casos sin mascarillas, se espera que fuera una consecuencia del final del estado de alarma, pero entendido como algo puntual. Porque la Policía Local será “implacable”, como reconoció este lunes a LA GACETA el concejal de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de Salamanca, Fernando Carabias, así como el propio alcalde hace una semana, para evitar excesos.

La Policía Local de Salamanca redistribuirá efectivos desde este mismo jueves, teniendo en cuenta que los agentes ya no tendrán que preocuparse del toque de queda o de los aforamientos en reuniones. “Los esfuerzos van a ir encaminados a evitar botellones”, explica Fernando Carabias. “No vamos a bajar la guardia, sino todo lo contrario. Es nuestra obligación y está en nuestras manos para atajar la situación”, añade el concejal responsable de la Policía Local.

Para llevar a cabo esta tarea de vigilancia, los responsables de la Comisaría de la Policía Nacional, Luis Esteban Lezaún, y el jefe de la Policía Local, José Manuel Fernández, ya han planificado actuaciones encaminadas a evitar situaciones en las que se cometan infracciones. Además, según reconoce Fernando Carabias, la Policía Local continuará con su labor de vigilancia para evitar ruidos en viviendas, que provoquen molestias a los vecinos, si bien tendrán que ser estos quienes denuncien la comisión de infracciones. “Estamos preocupados por la irresponsabilidad de unos cuantos están mostrando. Porque al actuar así —en referencia a la imagen dada en la noche del sábado al domingo en la Plaza Mayor— aumenta el riesgo de contagios y al día siguiente están con sus familias, con compañeros de clase. Hay quien ha confundido las ansias de libertad por un desmadre. Espero que una vez pasada esta euforia, haya más tranquilidad y sensatez”, explica el concejal de Protección Ciudadana.

Las multas por participar en botellones pueden llegar hasta 600 euros, aunque hasta ahora se han tramitado por 150 euros.

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