La importancia del Botánico según un arqueólogo: “Es un lugar vital para conocer la historia”

El arqueólogo Juan Francisco Vicente, encargado de las visitas guiadas al yacimiento arqueológico del Botánico describe la importancia que tuvo este punto de la ciudad antes del bombardeo sufrido durante la Guerra de la Independencia. “Es uno de los puntos centrales del siglo XVI y bajo estos restos hay una judería de la época medieval, la ciudad romana y la celtíbera del siglo IV”, detalla sobre un espacio que pasa normalmente desapercibido para salmantinos y turistas situado junto al Palacio de Congresos.

Las ruinas del convento de San Agustín representan el esplendor de la Orden, ahora en ruinas pero una pieza fundamental en la historia de Salamanca. “Por el convento de los Agustinos pasaron Fray Luis de León, fue prior San Juan de Sahagún o estuvo Santo Tomás de Villanueva”, recuerda Vicente. También recordó la importancia del Colegio de Cuenca o la iglesia de San Pedro de la que recordó el testimonio de un viajero del siglo XVIII sobre su belleza y cuya fachada se trató que protegiera la comisión estatal de la protección del patrimonio, sin éxito.

Vicente elogió el trabajo realizado a través de la realidad virtual para trasladar lo que muchas veces no consiguen las palabras. “Cuando solo vemos los muros es muy complicado hacerse a la idea de lo que había detrás por un espacio que también estuvieron los arquitectos Juan de Álava o los Churriguera”, detalla el arqueólogo.

Consciente de que bajo las ruinas se encuentra también parte de la historia de Salamanca, Vicente reconoce que el yacimiento del Botánico “es un lugar vital para conocer la historia de Salamanca”.

El convento de los agustinos, según recuerda José Antonio Bonilla en el ‘Callejero histórico’ fue una de las “mayores glorias monumentales de Salamanca”, construido por el prestigioso Juan de Álava y cuya fachada era comparable a la del convento de San Esteban. Se conoce el convento por un grabado que muestra el estado en que quedó el edifico después del expolio y destrucción de las tropas francesas.

Prácticamente nada queda del desaparecido Colegio Mayor de Cuenca. La recreación digital permite observar el claustro y la impresionante arcada de una de las residencias universitarias más importantes de la época. Fue uno de los cinco que había en la Corona de Castilla, cuatro de ellos en Salamanca y uno en Valladolid, y que corrió tan mala suerte como el convento de San Agustín.

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