La creación de 16 nuevas plazas para docentes podría romper la tendencia de la Junta

Cambio de planteamiento de la Consejería de Educación. Después de años en los que la negociación con los sindicatos docentes sobre las plantillas jurídicas del próximo curso eran duras por intentar reducir el número de plazas de maestro y profesor que se suprimían, en esta ocasión habrá menos problemas.

El cambio es el punto de partida. Si antes el planteamiento inicial de la Junta contemplaba la eliminación de hasta medio centenar de puestos en Salamanca, la mayoría en pueblos con muy pocos alumnos, esta vez la propuesta inicial de la administración es la de crear 16 nuevas plazas y no contempla supresiones.

El documento presentado por la Consejería de Educación a las organizaciones sindicales establece la creación de tres nuevas plazas en el cuerpo de maestros, una en Primaria en el colegio de Doñinos y dos itinerantes en el Félix Rodríguez de la Fuente y Filiberto Villalobos, ambos en la capital salmantina. En el caso de Secundaria y FP, el planteamiento de la Junta fija 13 nuevas plazas. La mayoría está destinadas a cubrir necesidades relacionadas con ciclos de FP. En este sentido, el centro más beneficiado es el Venancio Blanco de Salamanca, con cuatro puestos.

En comparación con otras provincias, Salamanca es una de las más beneficiadas. Solo Valladolid tiene un mejor balance, con 25 nuevas creaciones, mientras que León y Burgos “empatan”, también con 16. Ávila, Segovia, Soria y Zamora contarán con 8 más, mientras que en Palencia habrá 7. Es decir, ninguna perderá docentes. Hay que tener en cuenta que estos números pueden mejorar en la negociación que se abre en cada provincia con los sindicatos.

Salvo el año pasado, en los anteriores siempre se habían registrado más supresiones de plazas que creaciones en la negociación sobre las plantillas jurídicas. Hubo años, como en 2017 o 2018, en el que Salamanca perdió 25 y 28 plazas de docentes. La mayoría de las eliminaciones se registraban en el medio rural, donde la falta de alumnos es notable. De hecho, muchas de las supresiones eran de puestos que no estaban ocupados por un docente desde hacía tiempo, al no haber estudiantes suficientes.

El año pasado ya se advirtió un cambio en la postura de la Junta. Entonces decidió mantener la plantilla jurídica, con la creación de nuevas plazas muy aisladas. Entonces el argumento fue la pandemia. Las medidas para controlar los contagios dentro de los centros educativos han obligado a desdoblar clases y contratar más interinos, por lo que no tenía sentido eliminar plazas. Este año sigue influyendo el coronavirus, aunque la apuesta de la Junta ha sido definitivamente la de crear más plazas y descartar supresiones.

Los sindicatos consideran que la proximidad de las elecciones regionales ha afectado, aunque también apuntan a un efecto del reciente acuerdo firmado entre ANPE, CSIF, STECYL y CCOO para reducir la ratio de alumnos por clase y el horario lectivo de los docentes. A partir del próximo curso comienza a aplicarse el nuevo tope de estudiantes por aula, con el estreno en los primeros cursos de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato. En todos se ellos se rebaje en 3 el número de alumnos, por lo que la ratio se sitúa en 22 en Infantil y Primaria, 27 en ESO y 32 en Bachillerato. Educación también reducirá a 24 las horas lectivas por semana para los maestros, una menos que ahora, y los de Secundaria tendrán entre 18 y 19 horas en dos años cuando en la actualidad va de 18 a 21.

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