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Los ritmos del flamenco llegan este sábado al CAEM de la mano de una de las grandes figuras de este género: José Mercé. Mercé ha mantenido la esencia pura del cante y la ha mezclado con versiones flamencas de Manu Chao, Louis Armstrong o Joan Manuel Serrat, para situarse como un artista clave de la música española. Este cantaor ha sabido transmitir que el flamenco es para todos, llevándolo a la máxima popularidad sin perder esencia ni profundidad.
¿Cómo se siente al venir en concierto a Salamanca?
Me siento con mucha ilusión, con muchas ganas y con mucha fuerza para estar ahí este sábado. Creo que disfrutaremos todos de esta obra de 'El Oripandó.
¿Qué se va a encontrar el público salmantino en este concierto?
No quiero ser presuntuoso, pero el público se va a encontrar una obra que se trata de una autobiografía mía, donde hemos trabajado durante más de dos años mi amigo Antonio López y yo, que ha sido el productor de esta 'pequeña' obra, como la llamo yo. La verdad es que estoy muy contento y con ganas de que los salmantinos puedan escuchar esta autobiografía, donde espero que disfruten mucho. También recordaremos los ritmos clásicos del flamenco y también grandes éxitos. Creo que merece la pena porque será un buen concierto.
¿Qué quiere transmitir con este 'Oripandó'?
El 'oripandó' es lo que nosotros llamamos el 'caló', lo que en castellano es el sol. Son momentos que quiero contar de mi vida, con momentos de tiniebla, momentos buenos y momentos peores. Todo eso es lo que voy resaltando en las letras, en las pantallas y en las imágenes. Se ve todo de una manera muy completa.
¿Se queda con alguna canción en concreto de este álbum?
Realmente cada una tiene su corazoncito. Son ocho temas, en los que hablo de mí y de mi vida. Uno de ellos, que se llama 'Jamás desaparece lo que nunca parte', se lo dedico a mi hijo Curro, que como todos saben, se me fue hace treinta años. Es un tema que me cuesta la misma vida hacerlo pero que a la vez me gusta y me emociona. Es una especie de desahogo. La canción '50 primaveras' también es muy especial porque se la dedico a mi mujer por los 50 años que llevamos casados. En general, hay detalles muy bonitos de mi vida, desde que empecé en este mundo. Es una obra muy completa y, sobre todo, lo importante es que hay que escucharla mucho para llenarse de toda la enjundia que tiene.
Este es su disco número 20, ¿qué ha cambiado de ese joven José Mercé que empezó a cantar en tablaos flamencos al de ahora después de su larga trayectoria?
Yo diría que sigo siendo lo mismo. Porque la gente que me conoce de siempre, dice que soy una persona muy normal, que sigo siendo el mismo, con la misma esencia. Solamente he cumplido años, pero por lo demás sigo siendo ese cantante con la misma ilusión.
¿Sigue viendo el flamenco con la misma ilusión que hace años?
Con más. Con más ilusión y con más responsabilidad, por supuesto, pero con mucha más ilusión. Yo creo que el flamenco es nuestra música, nuestra seña de identidad de marca España y creo que es una de las músicas más importantes que hay a nivel mundial.
¿Cómo se siente el saber que ha trabajado con figuras tan importantes para el flamenco español como ha sido, por ejemplo, Camarón de la Isla?
Es que todos mis sueños, yo creo, que se han cumplido y más que quiero cumplir. Afortunadamente empecé muy joven cantando y, hasta la fecha, hasta que no me diga el público que me vaya, no me voy a ir. He escuchado a todos los grandes y he tenido la suerte de convivir con muchos de ellos además, porque yo digo siempre que he vivido entre esta época y la otra. Sigo teniendo ganas de hacer cosas.
¿En algún momento pensó en dejar este camino del flamenco?
Yo creo que la única duda que tuve a la hora de continuar con mi carrera musical fue cuando pasó lo de mi hijo Curro. En ese momento, si no llega a ser por mi mujer, no sé yo si estaría ahora mismo dedicándome a otra cosa. La verdad es que puedo decir que, afortunadamente, gracias a ella, sigo todavía en la música.
¿Ha sido un camino fácil llegar hasta donde está ahora?
Fácil no es nada en esta vida. Yo creo que hay que tener mucho empeño, y también que te tiene que gustar mucho. Hay que luchar mucho, escuchar mucho cante y aprender mucho. Hay una cosa en el mundo del flamenco y es que te mueres sin aprender.
¿Le tiene más cariño a alguna canción en concreto de toda su carrera?
Creo el tema de 'Aire'. Es el disco más vendido de la historia del flamenco, y creo que es un himno. No me puedo ir de ningún escenario sin cantar esta canción.
¿Qué consejo le daría a esos jóvenes que comienzan en el mundo del flamenco?
Mi consejo siempre es el mismo, que hagan lo que sientan en su corazón y no lo que le digan las multinacionales, que no lo equivoquen, que aprendan a que hay mucho en el mundo del flamenco y, una vez que tengan la esencia y toda la sabiduría que hay en este mundo, que intente crear su propia personalidad. Que hagan siempre lo que ellos crean conveniente.
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