La hostelería se frota las manos: hoteles llenos de jueves a domingo

Marino Hernández

Salamanca

Martes, 15 de abril 2025, 16:39

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Una Semana Santa «espectacular» para la hostelería de Salamanca. Ese es el sector del gremio. La primera parte de las fiestas se ha saldado con los hoteles al 80% y se espera un lleno total de cara las jornadas de jueves, viernes, sábado y domingo. Así lo manifestaba este lunes a este diario Helena Lorenzo, vicepresidenta de la Asociación de Hostelería de Salamanca.

Estas buenas perspectivas para las jornadas finales de la Semana Santa llegan a pesar de las numerosas cancelaciones que se están produciendo: «Muchos de los que tienen en su reserva la posibilidad de cancelar lo están haciendo, pero rápidamente se vuelven a reservar las habitaciones que van quedando libres».

La Semana Santa es, junto a las ferias de septiembre, la mejor época para la hotelería salmantina, y este año a pesar de la climatología complicada no está siendo menos. Durante el fin de semana pasado la media de ocupación se situó en el 80%, durante la jornada de lunes y martes la cifra baja a menos del 60%, y es a partir del miércoles cuando se espera el mayor desembarco del año de turistas en la ciudad.

Tal y como manifestaba Helena Lorenzo, la mayoría de los visitantes son turistas nacionales: «Principalmente se trata de familias completas. Padres que vienen con los hijos a disfrutar de la Semana Santa, de la gastronomía y de la provincia».

En cuanto al precio de las habitaciones para estas fechas se ha incrementado más de un 10% con respecto a la Semana Santa de 2024. A pesar de ello es bastante más económico encontrar alojamiento en Salamanca que hacerlo en ciudades similares en las que también tiene éxito la Semana Santa. A día de hoy las últimas habitaciones que se encuentran disponibles en los hostales y hoteles de la ciudad se pueden adquirir desde poco más de 100 euros, mientras que las más lujosas pueden llegar a superar los 250 euros la noche.

Una de las grandes noticias para los hoteleros de la ciudad está siendo que los establecimientos más alejados del casco histórico están teniendo una ocupación muy alta, y aunque en ellos quedan habitaciones disponibles se espera que las reservas de última hora que llegarán a medida que se sepan con certeza las temperaturas terminen llenando los hostales y hoteles.