El Hospital de Salamanca sigue sin superar el efecto pandemia

El día después de la publicación de las listas de espera quirúrgicas correspondientes al último trimestre de 2023 está marcado por las malas caras.

En la Consejería de Sanidad se siente que la estadística de Salamanca -y últimamente la de León- lastra una media regional que podría ser de las mejores de España.

Hace cuatro años, en diciembre de 2019, el Hospital cerró el ejercicio con 5.500 pacientes en lista y cuatro meses de demora media. Una pandemia después, la cifra ha crecido en casi 1.000 enfermos y dos meses más de retraso.

Sacyl quiere poner sobre la mesa las medidas que se han adoptado este año para mejorar las listas de espera del Hospital de Salamanca, el precio que han supuesto -derivaciones y peonadas- y el resultado obtenido. A partir de ahí, decidir qué se puede hacer para lograr una reacción que es urgente, sobre todo para los enfermos de Salamanca y de sus zonas de referencia.

Es obvio que en la Junta no han gustado nada las cifras del Hospital de Salamanca, pero en el propio Complejo también tuercen el gesto.

Algunos servicios quirúrgicos lamentan no disponer de más horas de quirófano en la jornada ordinaria, mientras que organizaciones sindicales señalan que «la dotación de personal del Hospital de Salamanca no debe compararse con la de otros hospitales de Sacyl, sino con los otros hospitales de nivel 4 de España».

Al servicio de Anestesiología, que también es clave en el apartado quirúrgico, llegó este martes la nueva jefa del departamento -procedente del Hospital de La Paz- que fue presentada a los tres jefes de unidad y en medio de un ambiente caldeado después de que la dirección haya decidido reubicar a una de las secretarias más veteranas del departamento.

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