El Hospital de Salamanca ya 'moldea' una Unidad de 3D que preste servicios a otros centros

El Hospital de Salamanca está moldeando el proyecto para una 'Unidad de 3D Hospitalaria': una herramienta que en los últimos años ha cambiado las reglas de la cirugía y que el Complejo Asistencial quiere explotar.

«El diseño 3D se está empleando mucho para la planificación de cirugías, puesto que permite imprimir un modelo exacto al del paciente que va a ser intervenido, de manera que antes de operarle se puede ensayar el procedimiento, decidir cuál es la mejor forma de abordarlo y tener las ideas mucho más claras cuando ya se actúe sobre un paciente real», explican desde el Hospital de Salamanca.

Las posibilidades -apuntan- son enormes. «Podemos imprimir guías para colocar posteriormente tornillos sobre un hueso. Podemos imprimir implantes, válvulas, etc», enumeran los especialistas.

Otra de las líneas de investigación que se están llevando a cabo en el Hospital es la que une la Terapia Celular con la tecnología 3D. En concreto, el doctor Fermín Sánchez-Guijo -jefe de Hematología- viene trabajando desde hace años en un proyecto para la colocación de células sobre modelos 3D para obtener mejores resultados tras la cirugía.

El planteamiento de Salamanca con este departamento es que, además de facilitar el trabajo de los profesionales salmantinos, podría dedicarse también a prestar sus servicios a otros hospitales menos desarrollados en este campo. Es decir, recibir encargos para la fabricación de modelos 3D y suministrarlos a terceros como si fuera un producto sanitario certificado.

«Los modelos 3D han dejado de ser algo excepcional. Están en el día a día, al menos de nuestro Hospital», explica uno de los primeros médicos que utilizó esta tecnología en Salamanca, el cirujano torácico Marcelo Fernando Jiménez.

Estas impresiones se han utilizado para reconstruir un esternón, para el tratamiento de aneurismas, operaciones de Traumatología, etc.

«Lo que nosotros queremos es poder crear y utilizar diseños 3D todas las semanas para planificar nuestras cirugías. Estos modelos ya son productos sanitarios: un modelo en tres dimensiones que nos permite recrear la anatomía exacta de un paciente determinado, visualizarlo y nos sirve de mapa. Por eso son productos sanitarios como otros que se pueden comprar en el mercado», argumenta Marcelo Fernando, que apostilla: «Este centro hospitalario de 3D también podría hacer estos modelos para otros hospitales menos desarrollados, aunque al ser un producto sanitario, deberían contar con su etiqueta y certificación».

Aunque son varios los hospitales españoles que ya trabajan de forma rutinaria con el 3D, en España hay dos grandes referentes para ese modelo que pretende Salamanca y que aspira a servirse y servir a otros de esta tecnología: la Unidad de Planificación Avanzada y Manufactura 3D Hospital Gregorio Marañón, así como el '3DPTLab' del Hospital Parc Tauli de Sabadell.

Son dos departamentos que cuentan con su propia estructura y personal dedicado específicamente a esta tarea.

En este proyecto hay varios nombres dentro del Hospital que están expecialmente implicados. Uno es el de la subdirectora médica María Díez Campelo. También el del cirujano torácico Marcelo Fernando Jiménez -por su experiencia con el uso del 3D-, aunque es otro cirujano torácico quien está liderando la preparación del proyecto.

El Hospital de Salamanca está en plenas conversaciones con el IBSAL para ir materializando el modelo y darle forma a la organización. Posteriormente será el momento de alcanzar nuevas alianzas con los laboratorios que posean la tecnología adecuada para este tipo de impresión aplicada a la sanidad. Hasta ahora se ha venido trabajando con distintas empresas -Gijón y Salamanca-, pero el deseo de todos sería que esta sinergia se pudiera firmar con el futuro Centro de Producción Digital del Ayuntamiento de Salamanca.

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