Hartazgo entre los vecinos de La Vega por las carreras ilegales nocturnas

Uno de los barrios más característicos de la ciudad sufre desde hace mucho tiempo una situación que supone una lacra para los vecinos que residen en él: la celebración continua de carreras ilegales. La situación “de película” que vive el Barrio de la Vega, en la avenida Juan de Austria, según algunos vecinos, es insostenible.

Muchos no se atreven a denunciar la situación por miedo a las represalias de los promotores de estas carreras callejeras, pero el perfil de los infractores siempre es el mismo: adolescentes que conducen coches que pueden suponer un peligro para ellos mismos y para el vecindario. El coche de gama más alta que usan para estos “juegos”, según aseguran los vecinos “es un BMW del año 2002.

“Es que no es un caso aislado, todas las noches están aquí a partir de las doce y una de la mañana, haciendo trompos, a altas velocidades y con la música altísima”, afirmó Laura (nombre ficticio) negándose a querer revelar su identidad por miedo, asegurando que los infractores lo tienen “todo calculado” cuando llegan los agentes.

“Ellos saben lo que hay aquí y son conscientes, pero no pueden hacer nada si en el momento en el que llegan no están infringiendo la ley”, reconoció la vecina asegurando que la única forma sería pillarlos “infraganti” en mitad de una de las carreras y se necesitaría a un agente allí todo el tiempo.

Los vecinos creen que la situación que llevan año denunciando podría solventarse instalando badenes reductores de velocidad en la avenida Juan de Austria, obligando así a los infractores a retirarse del barrio para realizar estas prácticas. Roberto, otro vecino de la zona, aseguró a este periódico que el malestar siempre está latente entre los vecinos: “No tienen ningún respeto, aquí vive gente muy mayor y a todos nos gustaría estar tranquilos por las noches sin música ni ruido, es que de verdad la situación es de película”.

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