

Secciones
Destacamos
Martes, 4 de octubre 2022, 09:59
El Restaurante El Mesón abrió en 1947, pero fue en 2011 cuando el empresario Gonzalo Sendín decidió tomar el testigo de su abuelo y de su padre, haciéndose cargo del negocio familiar reabriendo uno de los restaurantes más emblemáticos de la ciudad, El Mesón de Gonzalo. Sus antecesores ya habían puesto el listón muy alto y sobre él recaía una enorme responsabilidad: actualizar un negocio de éxito a los tiempos actuales.
Hoy, once años después de la reapertura, la excelencia de su cocina basada en el producto bien tratado y la calidad de su servicio al cliente les ha llevado a recoger reconocimientos de tal calibre como un Sol Repsol renovado año tras año o a alzarse como ganadores del Campeonato Mundial de Callos o Mejor Restaurante Digital de España.
¿Qué supone para el Mesón de Gonzalo participar en San Sebastián Gastronomika?
—Es un reto enorme porque llevamos Salamanca, una ciudad clave en el turismo de interior español, fuera de nuestras fronteras. Y lo hacemos en una ciudad como San Sebastián, que es considerada una de las cunas gastronómicas del mundo. Hemos venido a cocinar con los mejores y sentimos una mezcla de orgullo e ilusión tremenda en este evento.
¿Cuál es la esencia del Mesón de Gonzalo?
—La esencia de El Mesón de Gonzalo es la calidad, desde todos los puntos de vista: calidad del producto, de la cocina y del servicio. En definitiva, una calidad total en la experiencia. Tratamos de que el cliente que nos visita se sienta en su casa, salga satisfecho y vuelva a visitarnos. Creo que la constancia es lo más importante para que un negocio funcione. Cuando un negocio lleva abierto 75 años creo que es porque ha sabido adaptarse, superar dificultades y reconducir los problemas. Y eso solo se hace con constancia. En mi caso, igual que sucedía con mi abuelo y mi padre, la hostelería es mi pasión y mi vida gira en torno a ella. Solo así soy capaz de estar de manera constante en busca de esa calidad total.
¿Cómo han logrado adaptar a los nuevos tiempos un negocio familiar con tantísimos años de historia?
—Yo decidí reabrir un negocio que llevaba 64 años rodando y en el que jamás se había hecho cambio alguno. Eran otros tiempos, la gastronomía no era lo que es hoy en día y las exigencias de los clientes tampoco. A mi juicio empezaba a estar un poco obsoleto y aposté por una renovación integral. Quería darle continuidad pero actualizando todo: desde la carta hasta la ambientación, pero sin perder la esencia de El Mesón antiguo. Mantener la esencia taurina, la carta basada en productos de primera categoría y un servicio de calidad. Como decía, creo que hay que ser constante y estar al día de lo que ocurre en el mundo para saber qué tendencias y qué novedades hay ahí fuera para no quedarse atrás y satisfacer siempre las necesidades de los clientes.
¿Qué novedades habrá en los próximos meses?
—Este otoño-invierno va a ser una temporada con muchas novedades y nuevos platos que sorprenderán. Apostamos siempre por la temporalidad del producto y lanzaremos nuevas creaciones para que nuestro cliente habitual no se aburra. Es cierto que en el restaurante El Mesón de Gonzalo hay platos intocables, que encantan a los comensales y que no pueden desaparecer. Pero también es verdad que el cliente habitual está deseoso de que le sorprendas y eso es lo que más nos motiva. En los próximos meses habrá mucho ruido gastronómico con esos nuevos platos que sumaremos a nuestra oferta habitual.
Contenido patrocinado por El Mesón de Gonzalo
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Sigues a G. M.. Gestiona tus autores en Mis intereses.
Contenido guardado. Encuéntralo en tu área personal.
Reporta un error en esta noticia
Necesitas ser suscriptor para poder votar.