La familia salmantina que ha cedido gratis un piso a una madre con tres hijos, dos con enfermedades raras

Más allá de apoyos puntuales y donativos, hay salmantinos que optan por dar un paso más en la solidaridad. Cinco propietarios de viviendas de Salamanca han optado por realizar un contrato, denominado comodato con sus inquilinos con escasos recursos económicos, derivados por Cáritas para que se comprometan a pagar tan solo el coste de los suministros y no abonar nada por el alquiler o hacer un pago simbólico.

Es el caso de Mercedes, nombre ficticio para mantener en el anonimato su acción altruista. «Nuestra forma de colaborar fue ofrecer una vivienda que teníamos vacía para que una familia que no tuviera recursos para pagar el alquiler pudiera vivir en ella», detalla además que el trámite que realizaron a través de Cáritas fue «sencillo» gracias a su acompañamiento y apoyo. «Han sido dos familias con niños que estaban pasando por situaciones difíciles y que merecen todo nuestro respeto y admiración», señala. «Personas que, como nosotros, buscan ser felices, poder trabajar y tener un lugar donde criar a sus hijos», reflexiona sobre una acción que cada vez es más complicada de ver en el negro panorama actual. «La experiencia —continúa— está siendo muy buena y la sensación de ayudar y de hacer algo que es justo. Mientras podamos seguiremos ayudando de esta manera», concluye con el objetivo de dar continuidad a esta iniciativa cuando las familias que está ayudando al no cobrarle el alquiler puedan continuar su andadura por sí mismos.

Nadia, nombre al que nos referiremos en este reportaje ya que prefiere seguir en el anonimato, es madre de tres hijos y llegó procedente de otro país con dificultades. «Llegué a España con tres hijos y dos de ellos están enfermos con una enfermedad rara denominada distrofia muscular», señala. Gracias a esta acción altruista, a la que accedió a través de Cáritas, «solo pago los gastos y no el alquiler». «Llevo 4 años y media tranquila sin la preocupación de pagar el alquiler. Estoy perfecta en una casa que está completamente adaptada a nuestras necesidades. Doy gracias en el aniversario de los 60 años de Cáritas y a los propietarios por este tiempo que me he quedado en su casa», reconoce.Nadia asegura que gracias a esta iniciativa consiguió crear redes y vínculos en Salamanca. «Estoy muy contenta porque Cáritas me ha estado apoyando en todo momento tanto a mí como a mis hijos».

La responsable de Acogida, Oliva Martín, recuerda que estas acciones no son la práctica general pero que, en el momento que se producen, son muy agradecidas ya que para la población más vulnerable, el gasto de vivienda y alimentación supone el 60% de sus ingresos. En la mayoría de los casos se opta por recortar en los suministros como se aprecia en la campaña creada por la Facultad de Comunicación para esta Operación Vivienda con varios ejemplos: lavarse los dientes en un baño público, cargar el móvil en una sala de espera o llevar el abrigo puesto mientras que se está en casa.

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