Una entrega de Premios de Novela y Poesía «muy salmantina»

El «coqueteo con la fantasía» y el regreso a los clásicos que ha plasmado la salmantina Beatriz García en su primera obra «Teseo en llamas» le ha merecido el XXVII Premio Ciudad de Salamanca de Novela que ha recogido en la mañana de este martes en el salón de recepciones del Consistorio.

En su discurso de agradecimiento ha querido reivindicar la importancia de los clásicos, en concreto de la obra «Freda» que fue la primera que cayó en sus manos en su época de estudiante, a los que ha considerado que «son útiles para entender la vida y a nosotros mismos ya que nos ayudan a vivir».

Víctor Herrero recogió el galardón del XXVI Premio Ciudad de Salamanca de Poesía por «Lo que busca la abeja». El fraile capuchino optó por leer su poema «Como ave que posa» para agradecer la distinción, además de reseñar que el premio tiene más valor al llegar desde Salamanca, «la ciudad en la que he aprendido a leer, escribir, estudié Filología Clásica y en la que conocí la espiritualidad franciscana», confesó antes de despedirse con un «paz y bien».

«Ambos premiados son salmantinos, casualidad o no se demuestra que en Salamanca los hombres y las mujeres cumplen sus sueños», ha incidido el alcalde, Carlos García Carbayo, que ha hecho entrega de los galardones.

El primer edil también ha apuntado que ser salmantinos no es lo único que comparten Beatriz García y Víctor Herrero, «han comentado antes que han tenido al mismo profesor».

Por otro lado, Carbayo ha destacado la relevancia del premio, al que este año se han presentado 1.656 obras de origen español, de países de Latinoamérca e incluso de zonas en la que la primera lengua no es la nuestra como Estados Unidos, Japón, Irlanda e Israel, entre otros.

Por eso aprovechó para reivindicar la importancia de la lengua de Cervantes y de Salamanca como Ciudad del Español.

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